Feria de Otoño 2021

Ferrera y una gesta de otra época

El extremeño se las vio con una deslucida corrida de Adolfo Martín y cortó una oreja con el sobrero de regalo de Pallarés

MADRID, 03/10/2021.- El diestro Antonio Ferrera se enfrenta al primero de seis, de la ganadería de Adolfo Martín, en el sexto festejo de la Feria de Otoño en Las Ventas. EFE/ Fernando Villar
MADRID, 03/10/2021.- El diestro Antonio Ferrera se enfrenta al primero de seis, de la ganadería de Adolfo Martín, en el sexto festejo de la Feria de Otoño en Las Ventas. EFE/ Fernando VillarFERNANDO VILLARAgencia EFE

Volvía Ferrera a encerrarse con seis toros en Las Ventas. Ni más ni menos que con la corrida de Adolfo. Plaza1 quiso contar con él después de que en julio compareciese muy mermado tras sufrir dos cornadas en Alicante. Durante toda la tarde ejerció una destacada dirección de lidia, ordenaba con mando a una numerosa cuadrilla. Detalles tuvo con sus sobresalientes, a quienes dejó ejecutar el quite, una costumbre muchas veces ya perdida. Con el primero tuvo detalles de otras épocas como llevarle hasta al caballo galleando con el capote. Pero en la muleta el cárdeno, un Adolfo genéticamente al cien por cien, protestó en cada pase. La estocada acabaría siendo escupida.

MADRID, 03/10/2021.- El diestro Antonio Ferrera (c) se enfrenta a seis toros de la ganadería de Adolfo Martín en solitario, en el sexto festejo de la Feria de Otoño en Las Ventas. EFE/ Fernando Villar
MADRID, 03/10/2021.- El diestro Antonio Ferrera (c) se enfrenta a seis toros de la ganadería de Adolfo Martín en solitario, en el sexto festejo de la Feria de Otoño en Las Ventas. EFE/ Fernando VillarFERNANDO VILLARAgencia EFE

El segundo fue de menos a más. Pocas condiciones parecía tener el animal, pero Ferrera supo tener paciencia y darle su distancia, aunque el viento emborronaría todo y después la estocada caída haría el resto. No mucho mejores fueron las faenas al tercero y el cuarto, con astados poco colaboradores y el matador falto de inspiración, pudiendo poco más que machetearlos. Se lió con los aceros en el cuarto, en el que destacó un puyazo.

Lo mejor llegaría con el quinto y la ovación de la tarde para los pares de Fernando Sánchez. Se echó el manso, pero uno a uno pudo robarle Ferrera al que intentó matar caminando en tres intentos. Lo mejor del sexto, de nuevo, las banderillas, manso como él solo. Tanto que Ferrerá pediría el sobrero de Pallarés. Estallido en banderillas, con hasta cuatro pares. Se gustó con él, de mucha mayor movilidad. Mató de media y cortó una oreja . Pero la gesta con los adolfos había fracasado, aunque actitud no le faltó. Insaciable estaba Ferrera, que pidió un segundo sobrero. Pero el palco no lo concedió esta vez apoyándose en el reglamento taurino, al no aparecer contemplado el derecho del matador a esta petición.