Cargando...

Copa Davis

La derrota de Carreño ante Pella deja a España al borde del abismo

El sustituto de Roberto Bautista cayó por 6-7, 7-6 y 6-1. Después de dos sets muy igualados, desapareció en el tercero

Carreño no llega a una bola ante Pella Kiko HuescaEFE

España está al borde de la eliminación en la Copa Davis. Pablo Carreño no pudo con Guido Pella y cayó por 6-7 (3/7), 7-6 (7/4) y 6-1 en dos horas y 38 minutos. La desgracia de Roberto Bautista con la muerte de su padre dio la alternativa en la nueva Davis a Pablo Carreño. La vida ha sido cruel con el que era el número dos de España. Su padre falleció en plena competición y su madre, año y medio antes. El equipo español ha encontrado un motivo más para intentar levantar la sexta Ensaladera, pero Carreño no fue capaz de resolver.

El asturiano honró la memoria del padre de su compañero con una actuación notable, pero sólo en los primeros momentos importantes. El equilibrio que se adivinaba antes del partido (el español, 27 del mundo; el argentino, el 25; 2-0 ajustado para Pablo en los precedentes) se confirmó en la central. El argentino es un zurdo peligroso al que Carreño debía someter mandando desde el fondo y siendo atrevido. Y lo fue pese a que la primera tentativa de mandar quedase en nada. En el séptimo juego, logró un break, pero no fue capaz de confirmarlo en el décimo. El español sirvió para apuntarse la primera manga, pero el argentino sobrevivió hasta el desempate. Se trataba de templar los nervios en el primer instante crítico. Y Carreño lo hizo pese a encontrarse con un 0-2 de salida. Cuando Pablo es atrevido, su tenis le convierte en «top 10». Y así se mostró en el tie break. No se cortó. Fue al ataque con cabeza y Pella se vio desbordado. En una hora, el primer paso hacia la semifinal ya estaba dado.

Cuando Carreño gana en confianza es un jugador muy peligroso. Es capaz de trabajar muy bien los puntos y tiene la paciencia suficiente para esperar el golpe ganador. Anclado en el fondo de la pista se dedicó a mover a Pella y saber esperar. El argentino se vio cada vez más obligado. Sus golpes tenían que buscar más las líneas, las subidas cada vez debían ser un poco más forzadas y en una situación límite hay pocos jugadores capaces de responder con fiabilidad. El español tuvo una bola de break en el sexto juego que no concretó. Sí lo hizo Pella en el noveno. El décimo juego marcó la temperatura del drama. Fueron diez minutos de pelea plagados de alternativas. Pella sacaba para llevar el partido al tercer set. Carreño consiguió salvar dos bolas de set y a la segunda oportunidad recuperó el break. Llegó un nuevo desempate que empezó igual que el anterior. Pella arrancó mandón (0-2) y su saque esta vez le permitió forzar el tercer set.

Más de dos horas de pelea y la temperatura seguía subiendo. Tanto que Pablo Carreño se derritió. Un break en el cuarto juego mostró la vía libre para el argentino. El español no dio más señales de vida.