Este fin de semana, en un inicio cargado de emoción en “Julia en la Onda”, Julia Otero habló con firmeza sobre las devastadoras consecuencias de la DANA en la Comunidad Valenciana y en otras regiones de España. Acompañada de la versión suave de “Valerie” de Amy Winehouse, Otero comenzó diciendo: “Hoy no estamos bien, como todos ustedes, porque las imágenes que nos han dejado las aguas furiosas nos recuerdan que la naturaleza manda mucho, porque ya estaba allí antes que nosotros”. Su reflexión fue directa y cercana, una respuesta sincera ante una tragedia que, según reconoció, obliga a enfrentar muchas preguntas difíciles.

Recordando a las víctimas, Otero compartió el dolor colectivo al ver cómo cientos de personas perdieron la vida y dejaron sus historias, sueños y proyectos atrás. “Son compatriotas, personas que como usted y como yo empezaron la semana con sus cosas, sus amores, sus problemas y alegrías... pero ya no están. Es una lección de humildad para los que tuvimos mejor suerte”, expresó, dejando claro que esta catástrofe ha golpeado profundamente.

En su mensaje, la periodista también subrayó la realidad de vivir en un país próspero que, sin embargo, sigue siendo vulnerable a las fuerzas de la naturaleza. Citando al cantautor valenciano Raimon, recordó: “Basta que llueva mal para que nos alcance la catástrofe”, antes de dar paso a la canción “Al meu país la pluja”, un tema que simboliza la fragilidad ante un clima cada vez más extremo y cambiante.

Julia Otero dirigió su mensaje no solo hacia las tareas urgentes de rescate y reconstrucción, sino también hacia la necesidad de reflexionar profundamente sobre la preparación y la gestión de estas emergencias. “Es urgente enterrar a los muertos y devolver una vida digna a los que lo perdieron todo, pero también hay que hacerse preguntas incómodas”, insistió, dejando claro que las lecciones tras la DANA deben ir mucho más allá de la recuperación inmediata.

La periodista concluyó su reflexión señalando que no solo el cambio climático cobra vidas, sino también la ignorancia, la incompetencia y la falta de humildad ante la ciencia y la naturaleza. “Abrazamos desde aquí a los que lo han perdido todo”, añadió, subrayando el dolor y la responsabilidad colectiva ante un problema global que exige acción y conciencia.

Las palabras de Julia Otero resuenan en un momento en el que figuras públicas han puesto en duda la existencia del cambio climático, como Miguel Bosé, quien ha atribuido la DANA a la gestión gubernamental. Otero deja claro que el cambio climático no es solo una amenaza, sino una realidad que exige respuestas y una preparación a la altura del desafío.