Pesadilla en la Cocina

Alberto Chicote aterriza en Almería para rescatar “Los pitos” y un matrimonio en crisi

El chef acude a Almería para intentar salvar el negocio y la relación de una pareja atrapada en la tensión diaria de su restaurante

Alberto Chicote en el restaurante BrasasYmás de 'Pesadilla en la cocina'
Alberto Chicote en el restaurante BrasasYmás de 'Pesadilla en la cocina'Atresmedia

Alberto Chicote vuelve a la carga en “Pesadilla en la cocina” y en esta ocasión viaja hasta Roquetas de Mar, Almería, para intentar rescatar “Los pitos”, un restaurante a cargo de Marcelo y Rosana, una pareja brasileña cuya relación parece desgastada por el peso del negocio. La vida de Marcelo y Rosana en el restaurante se ha vuelto un tira y afloja constante: él se queja de que ella no pone suficiente empeño, y ella señala que Marcelo dedica más tiempo a charlar con los clientes que a ocuparse del local. Mientras Marcelo se encarga de la cocina y Rosana del servicio, la falta de organización y la baja calidad de los ingredientes han deteriorado el negocio, provocando que los comensales devuelvan platos casi a diario.

Chicote se encuentra con una primera toma de contacto desastrosa, tanto en la cocina como en el servicio. Marcelo desaparece de la cocina en pleno servicio para fumar y beber, dejando a su esposa en apuros y al restaurante sin rumbo. A esto se suma que los productos que emplean no cumplen los mínimos de calidad, y la atención al cliente es tan lenta que la mayoría de los comensales se van con una mala experiencia. A veces un amigo, Renato, les ayuda, pero el caos y las quejas persisten.

La falta de motivación parece afectar a todo el equipo del programa de laSexta, y Chicote observa en la cocina niveles de suciedad insostenibles que hasta llevan a Marcelo a tirar el microondas a la basura. En esta visita, el chef se enfrenta al reto de devolver al restaurante la profesionalidad y, al mismo tiempo, ayudar a Rosana y Marcelo a encontrar un camino común. Con una historia marcada por sacrificios, como vender sus alianzas para saldar deudas, Rosana ha llegado a un punto límite en el que contempla regresar a Brasil si no logran un cambio.

En medio de esta lucha, Alberto Chicote y el equipo de “Pesadilla en la cocina”buscarán darles a Marcelo y Rosana no solo las herramientas para mejorar su restaurante, sino también para restaurar la ilusión y la esperanza con la que un día decidieron abrir “Los pitos”.