Al Mobile World Congress vienen las grandes marcas, pero también llegan fabricantes poco conocidos, al menos en Europa. Uno de ellos es Unihertz, un fabricante chino que entre sus dispositivos ha presentado el modelo Tank, un smartphone rugerizado, un mercado en el que CrossCall domina claramente, aunque hay detalles de este Tank que llaman la atención. El primero es su batería: 22.000 mAh.

Obviamente esto incide mucho en su peso: un total de 560 gramos. El problema es que en las especificaciones se habla de rugerización, pero excepto por la clasificación IP68 no se menciona mucho más. Ni resistencia a caídas por encima de los dos metros, pruebas de abrasión, temperaturas de desempeño… A eso habría que sumarle que es un teléfono 4G.

Aún así tiene detalles interesantes. La batería se carga al 90% en menos de dos horas (viene con cargador de 66W) y puede actuar también como batería externa. En pruebas de laboratorio de Unihertz, se menciona que puede mantenerse activo hasta 150 horas de llamadas (6 días) y 2.380 horas (casi 100 días) en espera.

El modelo Tank de Unihertz incluye una linterna de alta potencia de 1200 lúmenes (una lamparilla de 75 W), sensores de altura, distancia, presión y velocidad. A eso le suma una cámara de 108MP, una cámara frontal de 32MP, una cámara de visión nocturna de 20MP y una cámara macro de 2MP.

Tiene una memoria RAM de 8 GB y 256 GB de almacenamiento. A esto le suma un procesador MediaTek MT6789 (el que lleva el Realme 10, por ejemplo) y una pantalla de 6,81 pulgadas. Su precio es de 360 euros pero sin saber las pruebas que ha pasado para considerarse rugerizado, lo que más llama la atención en este móvil es su batería y en un distante segundo lugar, su cámara, sobre todo la nocturna. Si es que cumple con sus promesas.