Samsung, Motorola, Huawei y hasta un futuro Pixel Fold de Google. Estos son los móviles plegables disponibles en el mercado. A pesar de tratarse de una tecnología que recién está comenzando a explorarse, hay muchos detalles que conocer a la hora de decidir cuánto pagar por un smartphone plegable y sacar el máximo partido del mismo. Un reciente informe de la OCU da algunas claves al respecto.

Si bien es cierto que tanto en el Samsung Z Fold como en el Huawei Mate X se gana en pantalla ( 7,8 y 8 pulgadas respectivamente), esta es la única ventaja importante. Pese al precio, por encima de los 1.500 euros para ambos modelos, las cámaras no van acorde a ello y se quedan por detrás de modelos de alta gama de las dos marcas. La batería es muy correcta, siempre por encima de los 4.000 mAh (lo mínimo que podemos exigir por ese precio) y algo similar ocurre con la memoria RAM y de almacenamiento y el procesador, aunque en este caso sí apuestan por lo ultimo de cada casa.

Los otros dos ejemplos disponibles son el Motorla Razr y el Samsung Galaxy Flip. El primero tiene el inconveniente que si bien es plegable, se queda a medias y no convence por su diseño y tampoco por su precio, cercano a los €1400. El Galaxy Flip, por su parte, es el que más cualidades tiene a la hora de aspirar a ser el primer plegable. Quizás no masivo pero sí aceptado y deseado. Tiene una batería decente (por encima de los 3.000 mAh), cámaras correctas, pantalla bien diseñada y memoria y procesador ajustado. Y es el más económico de todos: por debajo de los €1.100

El mayor problema, para los usuarios, para las marcas y para la OCU, es que se trata de una tecnología que aún no ha sido probada en el mercado más de dos años. Y muy poca gente está dispuesta a invertir en un móvil que generalmente cambia a los dos o tres años, el doble de lo que gasta habitualmente… sin saber si le durará ese tiempo. Por lo tanto, hasta dentro de dos años y al menos dos nuevos modelos de cada casa, la tecnología de pantalla plegable no despegará.

Y, cuando llegue ese momento, con la disponibilidad de 5G asentada, lo que habrá que exigir será una muy buena batería , una tarjeta gráfica sobresaliente y lo último en procesador. Puede que no se use como cámara, pero para gamers y fanáticos del contenido multimedia, sí será un recurso.