Ley antispam

Llamadas spam: la razón por la que es legal que te llamen y el problema del "consentimiento previo"

Mientras que la ley contra las llamadas de spam lleva en vigor desde junio de 2023, las empresas han encontrado un resquicio legal para llevar a cabo su actividad comercial

Una exteleoperadora revela el truco definitivo para dejar de recibir llamadas spam.
Una exteleoperadora revela el truco definitivo para dejar de recibir llamadas spam.Icons8 Team.Unsplash.

En algunos casos, no hay quien entienda al marco legislativo que tenemos en España. Y es que, mientras el mundo digital se encuentra en constante evolución, el repertorio legal parece quedarse atrás en cada movimiento. El 30 de junio del pasado 2023 entró en vigor la ley que prometía poner fin a la metralleta de llamadas de spam que recibimos en el día a día. Esta norma, lejos de cumplir el cometido con el que fue aprobada, ha servido como aliciente para las empresas para rebuscar en su ingenio una posibilidad de escape introducida dentro de la legalidad. Es posible que, a raíz la fecha mencionada anteriormente, recibamos más llamadas que nunca.

A lo largo de todo el recorrido de dicha disposición reglamentaria, en uno de sus apartados enuncia de manera clara y concisa que las compañías que se dedican a esta práctica "no pueden realizar llamadas comerciales no deseadas". Es por eso que, la acotación que permite la institución publica en su legalidad ha sido aprovechada por estos nómadas digitales. La permisividad se contempla como un vacío legal. Asimismo, otro apartado que queda reflejado en la ley es el de las llamadas automáticas que realizan las empresas y son el principal indicio de una estafa telefónica.

"Tenemos derecho a no recibir llamadas automáticas sin intervención humana o mensajes de fax, con fines de comunicación comercial sin haber prestado su consentimiento previo para ello" indica en la última revisión de la Ley General de Comunicación. Por lo que, tal y como esclarece, este ejercicio que normalmente nos despierta de la siesta, podría ser denunciado. Además, la extensión de este marco se limita solo a las llamadas emitidas desde territorio español, otro agujero que anima a todas estas empresas con sedes que sobrepasen las fronteras a continuar su actividad de manera impune.

El "consentimiento previo": el motor del spam

El famoso "consentimiento previo" es el problema principal de esta disyuntiva. Y es que este apartado está incluido en prácticamente todas las condiciones que aceptamos en nuestro teléfono sin ni siquiera mirarlas. Es decir, una acción involuntaria que tiene muchas más trascendencia de la que en un principio parece. Un simple clic que nos hace la vida imposible. Pero, ¿realmente hay alguna posibilidad para refrenar este ataque digital? La realidad es que es algo complejo el tratar de rechazar todas esos premisos que, al fin y al cabo han sido admitidos por nuestra propia cuenta.

No obstante, esta autorización ha de venir exclusivamente remarcada en los apartados opcionales, siempre y cuando tenga una connotación de índole comercial. La letra pequeña en este caso nos vuelve a jugar una mala pasada pues, por norma general, nadie revisa el contenido de estas secciones y trata de quitarlo de su pantalla lo antes posible dándole a "Aceptar". Otras soluciones como los filtros antispam o las conocida Lista Robinson, aunque son recomendables, también tienen sus taras.

Estoy en la Lista Robinson y me llaman, ¿es legal?

Debido a la popularidad de esta opción gracias al boca a boca se han interiorizado en el imaginario colectivo muchas falsas creencias en torno a la misma. Por lo tanto, hay que resaltar una serie de factores desconocidos por los usuarios que se registran en la página web. El uso de esta lista es efectivo pero no inmediato, por lo que se requiere un plazo de tres meses para que su funcionamiento entre en activo.

Por otro lado, la Lista Robinson incide sobre las empresas con las que el usuario no ha tenido un contacto previo, sin embargo, con vistas al cometido que buscamos, existe una opción para seleccionar manualmente las compañías con las que deseas eludir cualquier tipo de interacción. De esta forma, se permite la posibilidad de revocar llamadas a través de un buscador que incluye a diferentes compañías. Este sistema pone en contacto directo al usuario con la corporación llevando a cabo la acción que se desea.