Por increíble que parezca el timo de la estampita sigue vigente

Agentes de la Guardia Civil de Navalmoral de la Mata (Cáceres), han investigado a un hombre como presunto autor de un delito de estafa cometida mediante el ¨método de la estampita¨. Las pesquisas se iniciaron tras una denuncia interpuesta por una mujer de 80 años, residente en la misma localidad, a la que abordaron en los alrededores de su domicilio.

En este caso, el investigado se aproximó a la víctima y, tras entablar una conversación sobre temas religiosos, le reveló que se había encontrado una bolsa con gran cantidad de dinero debajo de un coche, mostrándosela a la misma. En este instante, entró en acción una tercera persona, presunto cómplice del investigado, quien, en un primer momento, se interesó por el tema religioso del que hablaban. Fue entonces cuando el investigado aprovechó para ofrecerle a la víctima la cantidad hallada a cambio de otra suma inferior; él no quería quedarse con su hallazgo y, si no accedía al cambio, lo rompería. Finalmente, estos se ganaron su confianza y, tras convencerla para acceder al intercambio y que ella hiciese, posteriormente, entrega de la suma encontrada a las autoridades, acudieron a su entidad bancaria para hacerles entrega, supuestamente, de 3.000€.

Gracias a los datos facilitados por la víctima, se ha podido identificar a uno de los presuntos autores, siendo este un hombre de 28 años de edad, vecino de una localidad de la provincia de Toledo, al que le constan numerosos antecedentes.

Con las pruebas e indicios obtenidos durante la investigación, los agentes procedieron a investigar al varón, el pasado día 29 de enero, como presunto autor del delito de estafa perpetrado mediante el método de la estampita. Ha sido puesto en libertad a la espera de juicio.

Timo muy antiguo, mediante el cual uno de los estafadores aborda a un viandante estableciendo una conversación con el mismo. En la conversación le dice que lleva gran cantidad de dinero o estampitas, a las que no les da el valor que realmente deberían tener, ofreciéndoselas a su víctima a cambio de una cantidad inferior de dinero. Durante este proceso, entra en acción un segundo estafador, quien entra en el juego para convencer a la víctima y poder, de este modo, culminar la estafa.