El cáncer de pulmón es la principal causa de muerte por cáncer en el mundo. En España, muere una persona cada 24 minutos por esta causa, y entre el 70 y el 80% de los casos se diagnostica en estadios avanzados. El cáncer de pulmón causa más muertes al año que los de colon, mama y útero juntos. La previsión de la Sociedad Española de Oncología Médica es que provoque 21.918 muertes en 2023, frente a las 11.131 de colon, las 6.652 de mama, las 3.994 de recto o las 673 de útero. Pese a ello, no existe cribado sistemático en nuesto país y el Ministerio de Sanidad concluyó, en un informe publicado hace un mes, que hacerlo "no es rentable" para el Sistema Nacional de Salud (SNS).

Tanto la Comisión Europea como el conjunto de sociedades científicas que se dedican al manejo, diagnóstico y tratamiento del cáncer de pulmón (la Sociedad Española de Neumología y Cirugía Torácica -Separ- la Sociedad Española de Radiología Médica y la Sociedad Española de Médicos Generales y de Familia, entre otras), así como las Asociaciones de Pacientes han manifestado su apoyo a este cribado. Entre otros muchos argumentos, critican la metodología y los resultados del informe porque el umbral de coste beneficio utilizado no contempla el incremento progresivo del precio de los actuales tratamientos disponibles para el cáncer de pulmón.

Ahora, los resultados de una investigación internacional a gran escala (cerca de 90.000 pacientes de todo el mundo), seguidos durante 20 años, les dan la razón. El trabajo, publicado en Radiology, la revista de la Sociedad Radiológica de Norteamérica (RSNA), evidencia que diagnosticar el cáncer de pulmón en estadio precoz con un cribado mediante tomografía computarizada (TC) de baja dosis mejora drásticamente la tasa de supervivencia a largo plazo de los pacientes. Los datos no dejan lugar a dudas. Los diagnosticados de cáncer de pulmón mediante cribado con TC de dosis baja tuvieron una tasa de supervivencia a 20 años del 81%, y, a los que se les diagnosticó en el estadio I- más precoz-, llegaron al 95%.

"Es la primera vez que se comunican tasas de supervivencia a 20 años gracias a un cribado anual", afirmó la autora principal del estudio, la doctora Claudia Henschke, profesora de radiología y directora del Programa de Acción Precoz Pulmonar y Cardíaca de la Facultad de Medicina Icahn del Mount Sinai de Nueva York (Estados Unidos), según recoge Ep. "Esta tasa de supervivencia a 20 años del 81% es la tasa de curación estimada de todos los participantes con cánceres de pulmón diagnosticados mediante cribado anual. Se trata de un beneficio enorme en comparación con la espera de un diagnóstico que, en la atención habitual, se produce por los síntomas", añadió.

Desde 1992, la doctora Henschke y sus colegas han estudiado la eficacia del cribado por TAC de baja dosis para el cáncer de pulmón. Esto llevó a la creación del Programa Internacional de Acción contra el Cáncer de Pulmón Precoz (I-ELCAP), que ha inscrito a más de 89.000 participantes en más de 80 instituciones de todo el mundo. En 2006, los investigadores identificaron una tasa de supervivencia a 10 años del 80% para los pacientes cuyo cáncer se identificó mediante cribado por TC.

Los resultados de este estudio demuestran que, al cabo de 20 años, los pacientes a los que se diagnostica un cáncer de pulmón en una fase precoz- cuando el tumor es muy pequeño y no se ha extendido a ningún ganglio linfático- pueden curarse eficazmente a largo plazo. "El cáncer de pulmón puede curarse si uno se inscribe en un programa de cribado anual que utilice un protocolo bien definido y un sistema de gestión integral -aseguró Henschke-. Es importante volver a someterse a un cribado anual".

Aunque los tratamientos de los cánceres en estadios más avanzados con terapia dirigida e inmunoterapia han avanzado mucho, la mejor herramienta en la lucha contra las muertes por cáncer- y la más coste-efectiva- es el diagnóstico precoz mediante el cribado con TAC de baja dosis antes de que aparezcan los síntomas.

Los investigadores también incluyeron a participantes que habían fumado menos de 10 paquetes al año, y que no habían fumado nunca pero habían tenido una exposición pasiva al humo del tabaco. En Estados Unidos, alrededor del 25% de los cánceres de pulmón se diagnostican en personas que nunca han fumado.