Almuñécar
Agredidos en los calabozos o en los mismos juzgados
Dos casos registrados en 2013 ilustran los riesgos que corren los magistrados. El suceso que obtuvo más repercusión tuvo como trasfondo el juicio del «caso Madrid Arena». El juez instructor Eduado López-Palop fue agredido el pasado mes de marzo en los calabozos de los juzgados de Plaza de Castilla por un detenido al que acababa de decretar prisión. Después de coger desprevenidos a los funcionarios de prisiones, el agresor, de origen marroquí y con varios antecedentes de robo con violencia, se escapó de su celda. Poco después se dirigió al despacho del juez, se abalanzó sobre él, le cogió del cuello, le tiró y le golpeó la cabeza contra el suelo. Además, también sufrió heridas la fiscal, que se encontraba junto al magistrado, y que además estaba embarazada. Afortunadamente, los vigilantes de seguridad llegaron a tiempo para evitar males mayores.
Posteriormente, el pasado abril, también hubo que lamentar un suceso similar. El suceso tuvo como escenario el Juzgado de Instrucción número 1 de Almuñécar (Granada). El agresor fue en este caso el denunciate en un juicio de faltas, al que, curiosamente, acudió para denunciar una agresión. Sin que se conozcan con certeza los motivos –al parecer, pretendía ingresar en prisión lo más rápidamente posible–, el hombre, que llevaba un objeto en la mano, agredió a la jueza y a la fiscal en pleno juicio. Un agente de la Guardia Civil, que se encontraba en aquel momento en la sala, fue capaz de reducir al individuo. Tras los hechos, la jueza se desplazó hasta un centro sanitario para ser reconocida por personal médico, aunque, afortunamente, la agresión no le causó ninguna lesión grave. El juez decretó para el agresor prisión comunicada y sin fianza.