Jerarquía, no despotismo

Ciudadanos registró ayer en el Congreso una propuesta de Ley por la que pretende que el nombramiento y el cese del fiscal general del Estado dependan del Congreso y no del Gobierno. Explican en su proposición que ambas decisiones deberían ser aprobadas con una mayoría de dos tercios. Rivera justificó su propuesta para cortar «el cordón umbilical» que une al Gobierno con el Ministerio Fiscal. Y para reforzar este argumento propuso ampliar el mandato del fiscal general de cuatro a seis años, con lo que no cesaría cuando lo hiciera el Ejecutivo.

También propone el partido naranja que las comunicaciones entre Gobierno y Fiscalía sean siempre por escrito, para que quede constancia de las conversaciones. Hay que señalar sin embargo que Cs ha registrado la propuesta con el único apoyo de sus 32 diputados, con lo que es difícil que saque adelante su proyecto.

Podría estar de acuerdo con la propuesta de Rivera con algunos matices que no son del caso, pero el problema es que el líder de Cs se equivoca cuando dice que «con esta Ley no habría habido caso Catalá ni caso Moix. Ni un ministro de Justicia se hubiera atrevido a dar instrucciones, ni un fiscal a atenderlas». Y digo que se confunde porque lo que ha pasado en Anticorrupción no tiene nada que ver con lo que él plantea. Y esta confusión crece cuando leo en su propuesta de Ley: «Se fortalecerá la autonomía de los fiscales en el ejercicio de sus funciones y se limitarán las órdenes de los fiscales jefes a instrucciones de carácter general, y sólo excepcionalmente respecto de casos concretos (en tal caso siempre por escrito)». Pues no. La Fiscalía es un órgano jerárquico, como lo es el Gobierno, el Ejército o cualquier empresa que se precie. Quizá Rivera confunda jerarquía con despotismo. Pero en las instituciones es muy conveniente que mande alguien, y no que el jefe recuerde las instrucciones al uso y que luego los subalternos obedezcan o le hagan una pedorreta.

Precisamente lo que ha pasado en Anticorrupción tiene mucho de esto último. Y me temo que el que sustituya a Moix se va a tener que enfrentar a algo más que simples instrucciones de carácter general.