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San Isidro: los 17 puntos de Madrid que tienes que visitar para conocer a su patrón

Te proponemos unan ruta para este lunes festivo en la capital. Conocer los lugares clave para entender la vida, la muerte y los milagros del santo más castizo

Mapa ilustrado de San Isidro
Mapa ilustrado de San Isidromadrid.esmadrid.es

Pocas ciudades se identifican tanto con la figura de su santo patrón como Madrid. El halo protector y bondadoso de San Isidro se ha manifestado en todas las épocas sin que las profundas transformaciones que ha experimentado la ciudad hayan afectado a la evocación de su vida virtuosa y sus milagros y a la pervivencia de los lugares relacionados con sus tradiciones más populares, que se han ido adaptando a los nuevos tiempos. Para recordar y honrar la vida y la muerte del humilde labrador Isidro, patrón de la villa y protector de la agricultura, el Ayuntamiento de Madrid ha elaborado un mapa ilustrado para recorrer los 17 puntos claves de esta figura popular. Se trata de un mapa ilustrado por Juan Berrio y con textos de Eduardo Salas Vázquez, director del Museo de San Isidro. Los Orígenes de Madrid.

1 Capilla de San Isidro Calle del Águila, 1-METRO: La Latina. Según la tradición, en este mismo lugar de la calle del Águila estuvo la casa en la que el 4 de abril de 1082 nació el santo, poco antes de que Alfonso VI de Castilla conquistase la ciudad después de más de 200 años bajo dominio musulmán. Aquí pasaría su infancia. Como homenaje al día de su nacimiento, la capilla abre el día 4 de cada mes y en celebraciones especiales.

2 Museo de San Isidro Plaza de San Andrés, 2 - METRO: La Latina Dedicado a los orígenes de Madrid -incluido su pasado hispanoárabe y medieval- está ubicado en un palacio que fue propiedad sucesivamente de los Lujanes, del Nuncio Apostólico, de los condes de Paredes de Nava y de los marqueses de Peñafuente. Tras ser adquirido por el Ayuntamiento en estado de ruina, éste llevó a cabo su reconstrucción total para convertirlo en museo. Su fachada de aparejo toledano, que combina el ladrillo y la mampostería, y el patio a dos alturas con columnas y zapatas de granito son un buen ejemplo de la arquitectura del viejo Madrid. Aunque desde el siglo XVII la tradición sitúa en este lugar la casa de los Vargas, familia para la que trabajó San Isidro, lo cierto es que no existen fuentes documentales ni hallazgos arqueológicos que así lo atestigüen. La capilla, decorada con unas pinturas murales de Zacarías González Velázquez, se levantaría sobre las estancias en las que supuestamente vivió y murió el santo. Y el pozo sería el mismo en el que se cayó el pequeño San Illán, hijo de San Isidro al que éste salvó de la muerte haciendo subir las aguas de forma milagrosa. Algunas salas del museo están dedicadas a la vida del santo.

Mosaico de Carabanchel
Mosaico de CarabanchelMuseo de San Isidro

3 Capilla del Obispo Plaza de la Paja, 5 - METRO: La Latina Francisco de Vargas construyó esta capilla gótica a mediados del siglo XVI para acoger los restos mortales de San Isidro, aunque años más tarde el cuerpo fue trasladado a la vecina iglesia de San Andrés. Su interior cuenta con uno de los conjuntos más hermosos de la escultura renacentista en España, que Gutierre de Vargas, hijo del anterior y obispo de Plasencia, encargó al artista Francisco Giralte en 1547. Sorprende el dominio del alabastro en la viveza de las figuras que adornan los monumentos funerarios de distintos miembros de la familia. El escultor, que había trabajado en el taller de Alonso Berruguete, también hizo el espectacular retablo en madera policromada que preside el espacio.

4 Iglesia de San Andrés Plaza de San Andrés, 1 - METRO: La Latina Detrás de la Capilla del Obispo se encuentra la Iglesia de San Andrés que, según pensaba el historiador del arte Elías Tormo, se levanta sobre los cimientos de una antigua mezquita situada junto a una torre de la muralla árabe de Madrid, que discurría por la actual plaza de los Carros. Años más tarde, ésta fue la parroquia de San Isidro Labrador, lo que permitiría que en 1544 el templo reclamara sus reliquias a los Vargas. Tras un largo litigio, finalmente lo consiguió y en 1622, después de la canonización, se decidió construir una capilla más monumental. Su interior estuvo decorado con obras de Francisco Rizi y Juan Carreño de Miranda, entre otros artistas. Por desgracia fue quemada al principio de la Guerra Civil y a excepción de una talla del santo realizada por Manuel Pereira, se perdió todo el conjunto, que fue reconstruido a mediados de la década de 1980.

5 La Cuadra Calle de Pretil de Santisteban, 3 - METRO: La Latina En el número tres de la calle de Santisteban hay una capilla que, según cuenta la leyenda, está situada sobre la cuadra en la que San Isidro guardaba el carro con el que los bueyes araban solos la tierra, para que él pudiera dedicarse a la oración mientras tanto. Su interior, que solo abre el día 15 de mayo, conserva varios cuadros de Manuel Castellano y una vidriera de la Casa de Maumejean.

6 Biblioteca Iván de Vargas Calle de San Justo, 5 - METRO: La Latina La que sin duda sí fue una de las casas de los Vargas, es hoy una biblioteca municipal con una sección especializada en libros y películas de temática madrileña. En el patio se conserva el brocal de un pozo, en el que también se ha ubicado el conocido milagro.

7 Casa de la Villa Plaza de la Villa, 5 - METRO: Ópera En la Casa de la Villa, sede histórica del Ayuntamiento de Madrid, estuvieron conservadas las reliquias de Santa María de la Cabeza hasta 1769. El más conocido de los milagros de la esposa de San Isidro fue atravesar el Jarama sobre una mantilla y sin mojarse. Se conocieron en Torrelaguna, localidad en la que el santo se había refugiado durante una razia de los musulmanes. La capilla de la vieja casa consistorial está decorada con unas pinturas murales de Palomino que narran la vida del santo labrador.

Imagen de la Casa de la Villa, Ayuntamiento de la ciudad
Imagen de la Casa de la Villa, Ayuntamiento de la ciudadEfe

8 Colegiata de San Isidro Calle de Toledo, 37 - METRO: La Latina Fue construido durante la primera mitad del siglo XVII como iglesia del Colegio Imperial de la Compañía de Jesús, donde su formaron muchos de los funcionarios de la corte. Tras la expulsión de los jesuitas en 1767, el templo acogió el cuerpo incorrupto de San Isidro Labrador y las reliquias de Santa María de la Cabeza. Con la creación de la diócesis de Madrid en el siglo XIX y hasta la consagración de la Almudena en 1993, esta monumental colegiata que recuerda en sus trazas al Gesù de Roma, hizo las funciones de catedral. Actualmente el claustro lo ocupa el Instituto de San Isidro.

10 Jardines de San Francisco El Grande Avda de la Gran Vía de San Francisco, 29 - METRO: La Latina En los Jardines de San Francisco El Grande, desde los que se divisa la otra orilla del río Manzanares, se encuentra el grupo escultórico titulado El sueño de San Isidro, una obra realizada en 1952 por Santiago Costa que narra el momento en el que, mientras los bueyes aran la tierra, el santo se ha quedado traspuesto -tal vez en diálogo con Dios-. Durante las fiestas patronales, celebradas cada año en torno al 15 de mayo, la Carrera de San Francisco y los vecinos Jardines de las Vistillas acogen la verbena correspondiente.

11 Puente de Toledo METRO: Pirámides Este fastuoso puente sobre el río Manzanares es obra del arquitecto Pedro de Ribera, que a principios del siglo XVIII introdujo en el paisaje madrileño la fantasía barroca de sus fachadas. Está decorado con dos hornacinas churriguerescas que protegen las esculturas de San Isidro y Santa María de la Cabeza.

12 Fuente de San Isidro Paseo de la Ermita del Santo, 72 - METRO: Marqués de Vadillo En una calurosa tarde de verano, el patrono madrileño clavó su aguijada en el suelo de estos campos de labranza de Carabanchel e hizo brotar un manantial que calmó la sed de Iván de Vargas, propietario de estas tierras. La tradición popular atribuye propiedades curativas a esta fuente.

13 Ermita de San Isidro Paseo de la Ermita del Santo, 72 - METRO: Marqués de Vadillo Aunque su origen se remonta a la Edad Media, fue la emperatriz Isabel de Portugal quien ordena erigir un nuevo santuario junto a la fuente milagrosa, en agradecimiento por la sanación de su esposo, Carlos V, y de su hijo, el futuro rey Felipe II, que habían bebido sus aguas con el fin de curarse.

14 Cementerio de San Isidro Paseo de la Ermita del Santo, 72 - METRO: Marqués de Vadillo A principios del siglo XIX, detrás de la Ermita del Santo, la Real Archicofradía Sacramental de San Pedro, San Andrés y San Isidro inaugura el que hoy es el cementerio más antiguo conservado en la capital, que será elegido por buena parte de la burguesía y la aristocracia como lugar de enterramiento. Aquí yacen muchas personalidades ilustres, como el escritor Leandro Fernández Moratín, el músico Francisco Asenjo Barbieri o la cupletista Consuelo Vello Cano “La Fornarina”. Entre los panteones, hay obras relevantes de Agustín Querol o Mariano Benlliure.

Sacramental de San Isidro
Sacramental de San IsidroAyuntamiento de Madrid

15 Pradera de San Isidro Parque de San Isidro - METRO: Marqués de Vadillo El 15 de mayo se celebra una romería en la que no falta música, limonada y rosquillas tontas (sin nada) y listas (con azúcar fondant). Muchos madrileños acuden a la pradera para pasar el día, comer y merendar, como inmortalizó Goya en un boceto que puede verse en el Museo del Prado.

La Pradera de San Isidro
La Pradera de San IsidroDavid JarLa Razon

16 Ermita de Santa María la Antigua Calle de Monseñor Óscar Romero, 92 METRO: Eugenia de Montijo Probablemente a las puertas de esta ermita románica, que es uno de los edificios más antiguos de Madrid, tuvo lugar el milagro de la borriquita. Se dice que mientras estaba rezando San Isidro en su interior, le interrumpieron unas personas para advertirle de que un lobo podría atacar en cualquier momento al asno que había dejado fuera. Éste les tranquilizó y les pidió que marcharan en paz. Al terminar su oración el santo encontró al cánido muerto a los pies del templo.

17 Basílica de Atocha Avenida de la Ciudad de Barcelona, 1 METRO: Menéndez Pelayo Algunas crónicas cuentan que San Isidro tenía la costumbre de detenerse a rezar en la Basílica de Atocha de camino a la labranza. E incluso se asegura que algunos de sus milagros más conocidos, como el del pozo, tuvieron lugar gracias a la intercesión de esta Virgen, una de las más antiguas advocaciones que se veneran en Madrid y protectora de la monarquía. El edificio actual es una reconstrucción libre del que ardió durante la Guerra Civil.

Se trata, en definitiva de trazar un recorrido alrededor de una vida que se apoya más en leyendas y tradiciones populares que en fuentes documentales. Las escasas noticias sobre la vida de San Isidro proceden de un manuscrito conocido como Códice de Juan Diácono. En él poco se dice de la época en la que vivió, aunque la mayor parte de los autores sitúa su existencia entre los siglos XI y XII, aproximadamente entre los años 1082 y 1172. Aunque entre las gentes perduró el recuerdo de su vida ejemplar, la devoción al Santo tiene su origen a principios del siglo XIII, cuando su cadáver incorrupto apareció en el cementerio de San Andrés.

La solemne canonización de San Isidro, que tuvo lugar el 12 de marzo de 1622, junto a la de Santa Teresa, San Ignacio de Loyola, San Francisco Javier y San Felipe Neri, fue uno de los acontecimientos más relevantes del Madrid de Felipe IV. Se organizaron importantes fiestas en las que participaron todos los ingenios de la Corte, en especial Lope de Vega, que había compuesto varias obras, como su célebre Isidro. Poema castellano, en el que ilustra la vida del santo en el Madrid de los primeros tiempos de la conquista cristiana. Con el paso del tiempo la figura de San Isidro no ha hecho más que aumentar hasta alcanzar el título que le otorgó en el año 1960 el papa Juan XXIII como patrón de todos los labradores, confirmando así la importancia y la extensión universal de su culto.

San Isidro y su esposa, Santa María de la Cabeza, reflejan plenamente el espíritu abierto y festivo de la ciudad y han despertado siempre el afecto y respeto de los madrileños y de todos “los isidros” que visitan cada año los lugares relacionados con su figura, especialmente la ermita donde según la tradición el santo hizo brotar agua de la tierra para satisfacer la sed de su patrón, Iván de Vargas. En los últimos años, el parque de San Isidro, que ocupa el espacio de la antigua pradera junto a la ermita, sigue recibiendo a multitud de madrileños el día de su festividad, el 15 de mayo, que este año tendrá especial relevancia al celebrarse el IV Centenario de su Canonización.