Medio ambiente
Así son los buses eléctricos que inician un "boom" en España
La última ciudad en sumarse al eBus ha sido Las Palmas de Gran Canaria, que ha confiado en Endesa X para emprender la transformación eléctrica de su cochera de guaguas
La movilidad sostenible es fundamental para reducir la huella de carbono. Lo vemos en la tremenda evolución de la tecnología eléctrica, que está teniendo un papel cada vez más importante en la descarbonización del coche privado. Pero esto no es suficiente. Así que los autobuses eléctricos están empezando a tomar las calles españolas.
Los primeros llegaron con cuentagotas, pero, en los últimos meses, el impulso ha sido irrefrenable. Las cifras hablan por sí solas: a finales de 2022 había 400 autobuses eléctricos matriculados en España. Estamos acabando 2023 y ya son más de 800. En diez meses, el número se ha duplicado. Solo entre enero y junio de 2023 las matriculaciones de autobuses eléctricos e híbridos subieron un 641,5%, según las cifras de AEDIVE.
Son números que confirman que la electrificación de las ciudades tiene su ejemplo de éxito en los autobuses. Y es que el avance de los eBus es ya un "boom" imparable al que cada vez se suman más ayuntamientos y operadores de transporte. El último en hacerlo, el ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria, que ha confiado en Endesa X para emprender la transformación eléctrica de su cochera.
"El bus eléctrico está creciendo exponencialmente. Hay grandes ciudades como Madrid, Zaragoza, Málaga, Oviedo o Badajoz que ya han comunicado que, de ahora en adelante, todas sus compras van a ser de autobuses eléctricos cero emisiones. E irá a más. Europa está subiendo sus exigencias a la vez que ha dotado con Fondos Next Generation a los países para que cumplan estas expectativas", afirma Juan Garrigosa, director de Administraciones Públicas de Endesa X, la filial de la compañía que ayuda a sus clientes a conseguir sus retos de descarbonización.
Los resultados de esta expansión son claros: "Un autobús eléctrico evita, de promedio, unas 100 toneladas de CO2 al año. Si somos capaces de retirar un autobús tradicional –que se mueve con hidrocarburos– por un eléctrico con cero emisiones, tendremos ese ahorro que es muy relevante, además de una ciudad más silenciosa y la experiencia de usuario es mejor", expone.
En la capital canaria, de la mano de la empresa pública de transporte Guaguas Municipales, la compañía eléctrica implantará 4 cargadores de 150 kW y se prevé que en el futuro carguen hasta 30 cargadores de manera simultánea. Pronto las guaguas de Las Palmas serán más silenciosas y más amables con el usuario final.
Pero la electrificación del transporte público va más allá de simplemente reemplazar autobuses de combustión por eléctricos. "Cada ciudad, con su singularidad, presenta retos que requieren soluciones personalizadas", explica Garrigosa. "Lo bueno es que la tecnología ya está madura. Hay cientos de miles de eBus en todo el mundo, de China a EEUU; Madrid o Las Palmas. Antes había limitaciones con las baterías: hoy, los autobuses eléctricos de Málaga realizan 17 horas de servicio con el aire acondicionado puesto todo el día", argumenta. "Las baterías son más ligeras y eficientes".
También se han reducido los tiempos de carga. Por eso, el diseño del despliegue ha pasado a centrarse en factores como la orografía de la ciudad, su climatología y, especialmente, el servicio que realizan los buses. "En cada ciudad hacemos un traje a medida", afirma el director. "En Madrid, Zaragoza, Sevilla o Málaga basta con realizar la recarga por la noche: unas 4 horas a entre 100-150 kW de potencia. En otras ciudades, como Barcelona, el autobús se recarga a unos 500 kW de potencia al final de la línea. En siete minutos, la batería está al 80%", cuenta.
Pero el resto de avances importantes en cuanto a tecnología se dan fuera de los autobuses. En Las Palmas, por ejemplo, la primera parte del proyecto de Endesa X contempla una ampliación del centro de transformación que la empresa municipal posee en su cochera de la calle Arequipa (El Sebadal). Esta incluirá la incorporación de la plataforma "Smart Charging", un moderno sistema que permite gestionar de manera inteligente los tiempos de recarga.
"El software se comunica con los buses y sabe el estado de las baterías y a qué hora tiene que salir cada uno, así que establece una estrategia de priorización de recarga. De este modo, contribuye a la eficiencia del servicio de su transporte público y el operador percibe unos ahorros energéticos y económicos importantes. Y como extra, el sistema puede hasta activar la climatización con tiempo para que el autobús esté a la temperatura correcta cuando el conductor tiene que salir", apunta Garrigosa.
En Las Palmas, como en otras ciudades que han apostado por modernizar y electrificar su transporte público, también cabe la posibilidad de introducir otra tecnología de vanguardia: la carga nocturna con pantógrafo. Esta solución, combinada con el software mencionado, supone toda una revolución. ¿Su mejor virtud? La automatización del contacto permite la carga instantánea de los autobuses por la noche (asegurando que estén listos para operar cada día) reduciendo la presencia de cables en el suelo, lo que mejora la seguridad de los operarios.
Pero el proyecto canario es tan solo la punta del iceberg. Actualmente, las actuaciones de Endesa X acumulanmás de 280 puntos de recarga para e-Bus en toda España. Destacan proyectos en cinco de las siete principales ciudades españolas: Barcelona, Madrid, Málaga, Sevilla y Zaragoza, que trabajan de la mano de Endesa X para electrificar sus cocheras.
En la capital catalana, la actuación de la compañía incluye la instalación de 119 cargadores con carga por pantógrafo entre cocheras y vía pública. En Madrid, están transformando el centro de operaciones de Fuencarral con un sistema de recarga automático inteligente. Y en Sevilla pusieron en servicio 10 cargadores, en lo que supuso la primera actuación de electrificación de la flota urbana de autobuses de la ciudad hispalense.
Con estos cambios, la compañía persigue ayudar a las instituciones y a los operadores del mercado a conseguir sus objetivos de descarbonización, pero también los de la Comisión Europea: que el 65% de los nuevos autobuses urbanos sean sin emisiones en 2030. Además, de este modo contribuyen a crear ciudades más habitables.
El autobús eléctrico es la forma más eficaz de conseguir ciudades más limpias, sostenibles y silenciosas, pero también más inteligentes. Apostar por la electrificación del transporte público es avanzar hacia una Smart City, al igual que el autoconsumo fotovoltaico, el alumbrado público inteligente, la eficiencia en la iluminación y climatización en los edificios o la monitorización digital de los consumos energéticos.
En definitiva, moverse por la ciudad puede ser una decisión fácil y cómoda cada vez más accesible gracias al auge del autobús eléctrico. Una solución para todas aquellas ciudades que quieren mejorar la vida de la ciudadanía, aumentar la eficiencia de sus servicios y optimizar el consumo energético.