Alicante
Fabra prefiere quedar en minoría a tener imputados en Les Corts
Císcar dice que el presidente quiere devolver la confianza en los políticos
Valencia- Cuando el presidente de la Generalitat, Alberto Fabra, heredó el grupo popular se le instó a expulsar a los diputados sobre los que pesase alguna imputación. Se decía entonces que el también presidente del PPCV no actuaba porque podría perder la mayoría. El caso está en que si los diputados no abandonan voluntariamente su escaño, que es personal, y optaban por pasar al grupo de no adscritos, los populares quedarían en minoría. Serían dependientes de los votos de sus ex compañeros de bancada.
Sin embargo, ahora el PP de Fabra se ha marcado otra prioridad. Quiere «devolver la confianza a las instituciones y a la política», aseguró ayer el vicepresidente y portavoz del Consell, José Císcar. «Los políticos deben ser ejemplares», repitió parafraseando al presidente y admitiendo que, aunque el PP tuviese que quedarse en minoría, todo diputado al que se le abra juicio, deberá abandonar el grupo parlamentario popular.
De esta manera ha quedado acuñada una nueva regla en la línea roja de Fabra. Hasta ahora el presidente destitutía a los cargos públicos imputados por corrupción y, en el caso de los diputados, los apartaba de cualquier cargo de responsabilidad.
El presidente dio el jueves por la mañana el primer aviso. Por la tarde, la diputada Angélica Such, imputada en la pieza de Gürtel que estudia las adjudicaciones de Fitur, anunciaba que renunciaba a su escaño. Enseñaba el camino a Milagrosa Martínez, imputada en la misma causa y a la que la Fiscalía le pide 13 años prisión.
«Se le expulsará»
El PP espera que Martínez imite a Such. Si no abandona el grupo popular voluntariamente «se le expulsará», aseguró Císcar.
Los Estatutos del PP marcan como motivo de expulsión del partido la existencia de condena. Sin embargo, Martínez ya tiene un expediente disciplinario abierto porque se le ha decretado la apertura de juicio oral. Ahora, el Comité de Derechos y Garantías podría decidir que como medida cautelar se pida que abandone el grupo parlamentario. Esta solicitud deberá someterse a votación de los diputados populares. Si el resultado fuera afirmativo, pasará a formar parte del grupo de los no adscritos. Llegada a esta situación, los Estatutos sí marcan la expulsión, por lo que de cualquier manera Martínez dejaría de pertenecer al Partido Popular.
Donde no puede actuar el presidente Fabra es en el grupo municipal, por lo que Martínez podría continuar al frente de la alcaldía de Novelda.
Únicamente una moción de censura la apartaría, hasta que hubiese condena, del partido.
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