Interior

El plan contra la inseguridad en Barcelona tardará tres meses más

La Generalitat no pondrá en marcha medidas urgentes pese a la alta criminalidad. Un sindicato de los Mossos califica la reunión de ayer de «paripé de cara a la galería»

La Generalitat necesitará tres meses para implementar las medidas acordadas con el grupo de trabajo

La seguridad de la capital catalana tendrá que esperar. El Plan Estratégico Barcelona Ciudad Segura del Govern tardará tres meses en estar listo, tal y como ayer explicó el conseller de Interior, Miquel Buch. Por si eso fuera poco, la jornada dejó una estampa cuanto menos curiosa. En paralelo a la reunión de la Generalitat, la delegación del Gobierno organizaba otro encuentro al que asistió el responsable de seguridad del Ayuntamiento, Albert Batlle.

En cualquier caso, el Plan Estratégico hace especial hincapié en la necesidad de reformar el Código Penal para combatir a los ladrones multirreincidentes. En el encuentro participaron representantes de la Generalitat, del Ayuntamiento, de la cúpula de los Mossos, instituciones económicas -Fira de Barcelona, el Puerto, la Cámara de Comercio, Fomento del trabajo y Pimec- y sectores afectados por la inseguridad, como los gremios de Restauración y de Hoteles, el Gremio de Empresarios de Discotecas y entidades vecinales como la FAVB. Según explicó el conseller de Interior, Miquel Buch, «el trabajo de los cuerpos policiales debe ir acompañada de herramientas legales» que permitan que las personas que delinquen sean sancionadas e ingresen en prisión , e instó al ejecutivo español y el Congreso a trabajar lo antes posible.

En la reunión se acordó que el plan de trabajo tendrá cuatro ejes: la reducción de la criminalidad; la mejora del servicio que se ofrece a la ciudadanía; la reestructuración de la organización policial de la ciudad, para que sea más cercana y eficiente, la mejora de la convivencia y cómo evitar el abuso del espacio público. Los agentes que participaron en el encuentro se dividirán en ocho grupos de trabajo, que abordarán cuestiones como la movilidad, el comercio o el ocio. En todos estos grupos, sin embargo, habrá representantes de la conselleria de Interior, de los Mossos y del Ayuntamiento de Barcelona. Según explicó Buch, a todos los agentes se les pide que puedan responder a dos preguntas: ¿qué pueden hacer los Mossos y de qué manera pueden ayudar en tareas de prevención.

El consejero de Interior valoró muy positivamente la reunión, sobre todo por la voluntad de trabajo conjunto de todos los agentes convocados. El consejero también destacó el trabajo realizado por los Mossos estas últimas semanas, que han incrementado un 80% la actividad policial, lo que se ha traducido en más presencia de agentes en la calle, más detenciones y más identificaciones de personas que han cometido algún delito.

El sindicato de los Mossos d’Esquadra USPAC tachó de «paripé» la reunión sobre seguridad ya que, a su juicio, «es imposible revertir» la situación de inseguridad mientras el conseller de Interior, Miquel Buch, les «dé la espalda».

Según USPAC, no es viable revertir la situación porque «la policía de Cataluña no dispone de efectivos para garantizar su seguridad» y, los que tiene -denuncian- trabajan en malas condiciones laborales. «La crisis que vive Barcelona y el territorio es real y continuará si se sigue explotando y menospreciando a los efectivos del cuerpo de Mossos d’Esquadra», subrayó el sindicato, quien ha insistido en los “horarios infernales» de la plantilla y en el precio de las horas extra, que denuncian estar por debajo del de otros cuerpos de policía. Por todo ello, para este sindicato de la policía catalana, la reunión no es más que «Un paripé de cara a la galería»