Antonio María Sáez Aguado
Aumentan los factores de riesgo cardiovascular en la Comunidad
El consejero de Sanidad, Sáez Aguado, alerta de la necesidad de cambiar los hábitos de vida para rebajar el número de defunciones por esta causa
Los factores de riesgo cardiovascular han aumentado en los últimos diez años en la Comunidad. Los castellanos y leoneses cada vez son más hipertensos, diabéticos, tienen hipercolesterol, obesidad y sobrepeso. Ésto lleva a que, a pesar de las mejoras asistenciales de la Sanidad, las enfermedades del sistema circulatorio sigan siendo la primera causa de mortalidad en la Región, con el 29,8 por ciento de las defunciones.
Así lo alertó el consejero de Sanidad de la Junta, Antonio María Sáez Aguado, quien presentó los resultados del estudio «Riesgo de enfermedad casdiovascular en Castilla y León», que analiza la evolución desde el 2004 hasta el 2014, y que se ha realizado con una de las muestras representativas más precisas de todas las realizadas en España hasta el momento.
El informe determina que la prevalencia de los hipertensos ha aumentado hasta un 20 por ciento en las personas con edades comprendidas entre los 45 y 59 años (54 por ciento) en los años del análisis. También ha aumentado en seis puntos el número de diabéticos y el de personas con hipercolesterolemia ha incrementado en 20 puntos (49 por ciento). Destaca en estos tres primeros parámetros el crecimiento que se produce entre los menores de 40 años.
Sin embargo, el número de fumadores ha disminuido en más de cuatro puntos a lo largo de la década mientras que el de personas obesas o con sobrepeso ha pasado a ser el 27,6 por ciento.
A pesar de todo ello, de forma paradójica, se constata un importante descenso de las tasas de mortalidad por estas enfermedades, siendo de 108 fallecimientos por cada 100.000 habitantes.
Pese a una mayor exposición a los factores de riesgo este descenso en las muertes es «consecuencia de una mejora de los tratamientos y de la asistencia sanitaria», dijo en consejero, aunque advirtió de que «está reducción no podrá mantenerse si no somos capaces de actuar sobre los factores y especialmente sobre los estilos de vida de las personas».
«No se puede dejar en manos del sistema la responsabilidad de unos hábitos de vida saludables, que deben ser adquiridos cuanto antes mejor para evitar todo tipo de enfermedades», sentenció.
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