Hamburgo
La Hidra y la bestia de Linneo
Cuando el joven Carlos Linneo, padre de la taxonomía universal, observó de cerca la hidra de siete cabezas embalsamada que orgullosamente le mostraba el alcalde de Hamburgo, no supo dónde meterse. El zoólogo y botánico sueco, abochornado tras inspeccionar aquella momia de serpiente remendada con las cabezas de otros seis ofidios, dedujo que al prócer, pobre hombre, le había dado gato por liebre algún predicador interesado en demostrar la existencia de la Bestia del Apocalipsis. La relación entre la taxonomía y la política es la misma que queda entre la figura de Linneo y la de José Antonio Pérez Tapias. El dirigente socialista, decano de Filosofía en la Universidad de Granada, se ha dado de baja del PSOE. Tras 25 años de militancia, Pérez Tapias abandona el partido al que se presentó como secretario general en 2014, primarias en las que ganó Pedro Sánchez sin discusión. Más discutido fue hace casi 300 años el veredicto científico que Linneo ofreció al alcalde de Hamburgo: la presunta hidra no era más que la momia de un fantoche. No hay registros de la respuesta del prócer hamburgués, pero sí de que Linneo tuvo que salir huyendo allende las murallas de la ciudad. La marcha de Pérez Tapias del PSOE es menos huida que despegue. ¿Adónde? Por ahora al limbo, lugar propicio donde los filósofos establecen categorías y elaboran los cuentos por venir. Si Linneo fue apodado como el segundo Adán, cabría denominar a Pérez Tapias como el tercero, de tan agudamente que denomina a las especies. Por ahora ha renunciado a su papel crítico dentro del socialismo para, según él, contribuir al debate desde foros alternativos. El ya ex líder de la corriente Izquierda Socialista se acerca a Podemos, ese predicador que vocea tanto bestias como hidras de siete cabezas.