El padre de Rocío Osorno las odia, y el nuestro también. Estamos hablando de las zapatillas UGG de estar por casa, que también se llevan a la calle, y que desesperan a todo padre clásico. Y hablando de botas calentitas, Sara Carbonero ya ha sacado a pasear sus botas UGG favoritas y las de todas las chicas que más saben de moda como Rocío Osorno. Pero está claro, que esta temporada han vuelto aún con más fuerza que nunca, recuperando ese protagonismo perdido en los últimos años. No es ningún secreto que el estilo après-ski es una de nuestras debilidades. Todo lo que sabemos sobre él lo aprendimos de Lady Di, Grace Kelly o Jackie Kennedy, y ahora es Sara Carbonero y Rocío Osorno las que recuperan sus botas UGG más calentitas en su momento de máximo esplendor.

Si la periodista lo hacía este fin de semana en su versión botas, Rocío Osorno lo ha hecho en su versión zapatilla para su viaje a Madrid para grabar una campaña con Ghd, y entre descanso y descanso, el calzado más cómodo y calentito. Eso sí, casi se las olvida en Sevilla porque su padre se las había dejado medio escondidas detrás de un banco. Muy de padre, sí. Una zapatillas UGG que Rocío Osorno ha lucido para ir a desayunar en su hotel de Madrid con unos leggings negros y una sudadera gris, todo antes de asistir esta tarde a la gala de los Genz Awards, que recordamos que son los nuevos premios de influencers creados por Mediaset.

Zapatillas Scuffette, de UGG (114,95 euros)

Unos galardones que buscan hacerle la competencia a los Premios Ídolo de Dulceida, a los que recordamos, este año Rocío ni su amiga Teresa acudieron porque estaban enfadadas por no pasar por la alfombra roja. ¿La venganza se sirve en plato frío?