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«Breaking Bad»

La casual gallina de los huevos de oro

«Breaking Bad» larazon

La casual gallina de los huevos de oro

El interés que despiertan las series de televisión hoy en día permite que muchas producciones agranden su leyenda incluso años después de haber terminado. En el universo seriéfilo siempre hay una preguntar por responder, un misterio por desvelar o una anécdota que, por mucho tiempo que pase, servirá para ser titular en cualquier publicación especializada. Y para el seguidor de la producción siempre resulta gratificante descubrir nuevas curiosidades de esa serie que, durante un tiempo, se convirtió en la razón de sus desvelos. Por delante algunas de las singularidades de una de las series más importantes de los últimos años, «Breaking Bad».

Según cuenta Brett Martin en su interesante libro sobre producciones televisivas «Hombres fuera de serie» la idea inicial de la producción nació en una conversación casual entre Vince Gilligan y Thomas Schnauz, que trabajaron juntos en «Expediente X». Desesperados por la situación laboral que vivían, bastante incierta, Gilligan bromeó sobre cambiar de profesión y Schnauz le contestó que deberían comprar una caravana «y convertirla en un laboratorio de metanfetamina». Según Martin, la imagen que se proyectó en la mente del director fue tan potente que colgó el teléfono y comenzó a tomar notas.

En su intento de llevar su ocurrencia a la televisión, Gilligan logró un acuerdo con Sony para producirla, pero los problemas llegaron a la hora de encontrar cadena. Los ejecutivos de TNT dijeron que les gustaba pero que la presencia de la metanfetamina provocaría su despido. Carolyn Strauss de HBO, simplemente les dio las gracias «por venir», mientras que John Landgraf, director ejecutivo de FX, comentó tras ver el piloto que le recordaba a «Weeds», serie que Gilligan no conocía. A pesar del desconcierto inicial la cadena compró los derechos de la serie, aunque finalmente desarrollaron otra. Gracias a un costoso (física y económicamemte) acuerdo, FX acabó vendiéndosela a AMC, que tras estrenar «Mad Men» estaba metida de lleno en la producción televisiva.

La serie se ubicó, originalmente, en el sur de California. Pero ante los incentivos fiscales con los que contaba el estado de Nuevo México, la producción acabó ambientándose en Albuquerque.

Jesse Pinkman, el personaje interpretado por Aaron Paul, estaba destinado a morir en el noveno episodio de la primera temporada. El actor, que comenzó en el mundillo trabajando en publicidad, nunca ha tomado clases de interpretación.

Por el contrario, los creadores tenían previsto que el enemigo de White y Pinkman en la segunda temporada fuese el temible Tuco. Pero el actor que lo interpretaba Raymond Cruz, fue elegido para un papel importante en «The Closer» y decidió terminar su relación con «Breaking Bad».

En sus cinco temporadas los espectadores pudieron ver hasta 270 muertes. Entre las más traumáticas se encuentra, sin duda, la de Jane, la novia drogadicta de Jesse interpretada por Krysten Ritter. Según Anna Gunn, Skyler en la serie, Cranston lloró durante quince minutos tras grabar la trágica escena.

A pesar del carácter dramático de «Breaking Bad» buena parte de su elenco está formado por actores cómicos. Bob Odenkirk, Saúl en la ficción, trabajó cuatro años en el «Saturday Night Live», mientras que los actores que dan vida a Huell, Gomie y Kuby tienen amplia experiencia como comediantes. Y el primer papel importante en la televisión de Cranston fue en una comedia, «Malcolm».

LO MEJOR

Bryan Cranston, Anna Gunn, Bob Odenkirk y Jessica Hecht entre otros, ya habían trabajado «juntos» en otra producción muy conocida, «Seinfeld». Hasta siete de los actores que formaban parte del elenco de «Breaking Bad», trabajaron de puntualmente en la aplaudida comedia de los noventa.

LO PEOR

Aunque la realidad es para los documentales y no para las series, la verosimilitud de algunas escenas clave de la producción es criticada frecuentemente. Al más que criticable acierto de la escena final, se unen los comentarios sobre el robo del tren, que algunos califican de innecesario.