¿Qué consecuencias puedes tener en tu vida adulta si has sufrido bullying?

En nuestra infancia podemos llegar a vivir momentos incómodos y situaciones que marquen nuestra personalidad, nuestros recuerdos y toda nuestra vida. Aunque, en muchas ocasiones, nos hagamos los fuertes, todos tenemos esa parte sensible donde recordamos las partes más incómodas de nuestra vida y el lugar donde nos volvemos vulnerables. Una de las zonas de nuestra mente que pueden hacernos más daño, son los recuerdos del colegio, recuerdos donde los otros niños en el patio del recreo, podían hacer bullying o acosar, sin que nadie se diese cuenta. Había personas que abusaban verbalmente de los demás y los convertían en el verdugo perfecto para ‘creerse alguien’ delante de los demás y, a la larga, nos hemos dado cuenta que lo único que han conseguido es ser unos mediocres que no merecen la pena.

Pero, ¿qué pasa cuándo una persona ha sufrido bullying y está en su etapa más adulta y lo piensa? ¿se ha superado? ¿nos ha dejado secuelas? Hablamos con Alicia Reinoso, psicóloga y experta en conductas similares, que nos ha indicado cómo localizar si estamos o hemos sufrido bullying en algún momento de nuestra vida y si, realmente, hay consecuencias que marcan nuestro día a día, por culpa de situaciones como esas.

Cómo localizar si hemos sufrido bullying alguna vez

Si estamos en la época del colegio, es probable que nos sintamos identificado con estas palabras que nos afirma la experta: ‘‘En niños existe mucha sintomatología relacionada con la somatización. Precisamente, porque los niños tienen menos capacidad para expresar y detectar sus estados emocionales, el cuerpo ‘recoge’ en un síntoma (dolor de cabeza, de tripa, vomito, etc.) lo que no se expresa con las palabras. Esto además suele suceder al finalizar el fin de semana, o después de un puente y/o vacaciones’'. Sin embargo, hay más casos dónde se nos observa el cambio de estados de ánimos:‘’En otros casos se observan estados de ánimo muy depresivos, pérdida de interés por las actividades que antes si eran motivadoras y una excesiva inhibición (en niños, también, mutismo selectivo). Pero también puede que una señal de alerta sean conductas más disruptivas: agresividad, falta de control de la ira y de los impulsos, por ejemplo, insultar en casa o comer compulsivamente’', añade Alicia.

Si has sentido o tienes estos síntomas es muy probable que hayas sido una víctima de bullying en algún momento de tu vida, ya sea en el colegio, en el trabajo o dentro de tu pareja.

¿Qué consecuencias puede tener el bullying en la edad adulta?

Si crecemos e identificamos alguna de estas consecuencias, es probable que necesitemos hablar con un especialista para evitar desarrollar conexiones e interpretaciones de forma incorrecta: ‘‘Hay un gran abanico de consecuencias, y esto dependerá de la edad de inicio del bullying , su duración en el tiempo, si se pudo hablar de ello en casa, si alguien adulto se dio cuenta y ayudó a la víctima. En función de toda esta casuística podemos encontrar, junto con las variables de cada sujeto y sus propios recursos, mucha variabilidad. Aún así si se puede nombrar como consecuencias frecuentes: inseguridad en las relaciones personales y profesionales, desconfianza y temor a la burla y castigo, aislamiento, depresión y ansiedad (no tiene por qué manifestarse únicamente en las relaciones ), entre otras.’', explica la psicóloga.

No nos cabe ninguna duda, de que más de uno de nosotros ha sufrido bullying sin saberlo y es el momento de saber si las consecuencias de problema social, se pueden remediar y llegar a estabilizar nuestras habilidades emocionales. Recuerda, siempre es recomendable hablar con un especialista en la materia.