Las francesas dicen que la boina parisina sigue siendo tendencia este invierno, y nosotras les vamos a hacer caso

En el imaginario colectivo habrá pocas cosas tan asociadas a Francia como la boina. Y es que al igual que la baguette, este adorno se ha convertido en el favorito de todas las chicas galas y por consiguiente también de todas las amantes de este estilo. Series como ‘Emily en París’ parecen haber resucitado el gusto por ella, donde no solo vemos e Lily Collins luciéndola, si no también nuestra nueva chica francesa favorita, Camille. Aunque las tendencias han traído consigo una sofisticación de este accesorio, y los modelos van mucho más allá del clásico diseño de lana, pues las lentejuelas, terciopelos el tweed y hasta el tejido denim se han adueñado también de ella.

Pero volviendo al origen, aunque hay pruebas de que la boina apareció ya en la Edad de Bronce, no fue hasta 1920 cuando la capital francesa empezó a popularizar su uso. Si bien antes era solo usada con un fin útil, especialmente por obreros y de más trabajadores para protegerse del frío, su uso se popularizó entre todas las clases sociales, pero especialmente entre artistas y bohemios, que hicieron de ella su signo más distintivo, casi como el famoso jersey de rayas.

Convertido en los últimos años en un cliché, las it-girls parisinas han querido reivindicar ahora su uso, y lo lucen in complejos integrándola en todos sus estilismos. Pero parece que la tónica general pasa por volver al origen mas humilde de este sombreroyapostar por los modelos más clásicos y sencillos. Las tiendas lo saben, y no han querido dejar pasar la oportunidad de añadir algún diseño en todas sus colecciones invernales.

Boina de lana en color gris, de Parfois (9,99 euros)

Boina confeccionada en lana en color azul, de Zara (15,95 euros)

Boina de lana en color negro, de Mango (12,99 euros)

Boina de lana en color rojo, de H&M (9,99 euros)

Boina de punto con un pequeño logotipo bordado en color beige, de Benetton (16,99 euros)

Gracias a su más que asequible perfecto puede ser el regalo perfecto que estabas buscando si no sabes que regalar el próximo día 6 de enero o directamente pedirle a los Reyes Magos en forma de capricho lowcost. Y lo mejor de todo es que no hace falta que vayas a París a buscarlo. ¿Un consejo de estilo? El clásico tono rojo intenso siempre es una apuesta segura que nunca pasa de moda.