Ucrania rechazó 41 cazas F/A-18 Hornet de Australia al considerarlos "basura voladora"

Un alto mando militar de Ucrania rechazó una oferta lanzada por el Ministerio de Defensa australiano en marzo de 2023 para enviar al país invadido por Rusia hasta 41 cazas retirados de cuarta generación F/A-18 Hornet de la Real Fuerza Aérea, según ha revelado el medio Australian Financial Review. La propuesta de los Hornets tenía sentido. Diseñados para ser embarcados en portaaviones, los resistentes trenes de aterrizaje de estas aeronaves se consideraron adecuadas para las pistas de aterrizaje de Ucrania, demasiado dañadas por la guerra. También pueden aterrizar y despegar en distancias cortas, lo que les hace más apropiados para ser usados en carreteras ucranianas.

La propuesta de la donación australiana ocurrió dos meses antes de que Estados Unidos diera luz verde a la reexportación a Kiev de cazas F-16 de Lockheed Martin con el objetivo de frenar el dominio aéreo de Rusia. Ucrania ya estaba en contacto con EEUU para conseguir el envío de varios F-16 Fighting Falcons, menos robustos pero muy abundantes en países europeos como Dinamarca, Noruega y Países Bajos, dispuestos a ceder parte de su vieja flota.

Sin embargo, las autoridades militares de Ucrania rechazaron el F-18, un caza de peso medio más grande y desarrollado con una configuración bimotor que le confiere un mayor alcance. Según el Australian Financial Review, la Fuerza Aérea de Ucrania temía verse sobrepasada por dos tipos de cazas diferentes, cada uno de los cuales requeriría su propia infraestructura de mantenimiento, municiones y entrenamiento.

Según la citada información, un alto funcionario de la Fuerza Aérea de Ucrania rechazó la donación y calificó el avión de “basura voladora” de la que Australia estaba interesada en deshacerse. "Esa reacción acabó con el acuerdo sobre el F/A-18. Si no hubiera sucedido así, ahora estarían sobrevolando Ucrania”, concluye la información. Kiev se negó a recibir los F-18, pero en cambio sí que aceptó un número importante de cazas de origen soviético MiG-29 procedentes de varios países de Europa del Este. El MiG-29 ha participado en combate en infinidad de ocasiones y se le considera el equivalente más cercano al F-18.

Tanto el MiG-29 como el F-16 son aviones que se siguen produciendo para la exportación en la actualidad, mientras que el F-18, a pesar de presentar un diseño más nuevo, dejó de producirse hace 24 años. Los últimos Hornets retirados de la Armada de Estados Unidos fueron reemplazados por F-16.

Military Watch Magazine asegura que durante sus años de servicio, el F-18 se ha enfrentado con dos tipos de cazas extranjeros en combate aire-aire, el MiG-21 y el MiG-25 soviéticos pilotados por la Fuerza Aérea iraquí. En ambos, asegura el citado medio, ganó el avión estadounidense.

Con casi 50 años de historia, el F-16 ha sido durante décadas el avión de combate occidental más barato del mercado. Diseñado en un principio por la compañía estadounidense General Dynamics como caza ligero, fue evolucionando hasta convertirse en un potente cazabombardero presente en las Fuerzas Aéreas de 26 países.

El primer vuelo de un F-18 se produjo en 1978. Desde entonces, este caza polivalente ha servido en las fuerzas aéreas de varios países, como Canadá, Finlandia, Australia, Suiza y España, donde fue incorporado por primera vez en 1986. Se calcula que se han producido unas 1.500 unidades.

Lo que Australia quiere dar a Ucrania

Actualmente, las conversaciones actuales entre los dos países incluyen la posibilidad de que Ucrania reciba tanques australianos M1 Abrams o helicópteros de ataque Eurocopter Tiger, según una fuente citada en dicho medio, donde se informa que 59 tanques M1 Abrams del Ejército sean reemplazados por una versión más moderna el próximo año. Ucrania recibió 31 tanques Abrams de los arsenales estadounidenses, lo que significa que Kiev no tendría que crear nuevos sistemas de suministro para respaldar la llegada de los tanques australianos.