Estados Unidos

¿Quién ganará el pulso Trump vs Justicia?

El presidente de Estados Unidos ha cruzado ya líneas nunca exploradas, así que muchos se preguntan cuáles podrían ser las consecuencias para su equipo si siguen ignorando las normas judiciales

Washington (United States), 21/03/2025.- US President Donald Trump delivers remarks from the Oval Office of the White House in Washington, DC, USA, 21 March 2025. Secretary Hegseth joined President Trump to announce a defense program, which includes Boeing developing the F-47 next-generation fighter jet for the US Air Force. EFE/EPA/YURI GRIPAS / POOL
Donald Trump, este viernes en el Despacho OvalYURI GRIPAS / POOLAgencia EFE

Donald Trump está dispuesto a desafiar a todo aquel que no acepte sus términos, incluidos los tribunales, la única institución que, en principio, puede poner freno a algunas de sus políticas de cierre de departamentos públicos y expulsión masiva de inmigrantes. Ayer el mandatario amanecía publicando este mensaje en Truth Social, ¨ningún juez de distrito, ni ningún juez puede asumir las funciones de presidente de Estados Unidos. Solo acabaría en crimen y caos¨.

Trump está enfadado porque varias órdenes judiciales están frenando algunos de los últimos movimientos de su administración, como expulsar a las personas transgénero del servicio militar, rescindir los contratos de empleados públicos que se encontraban en periodo de prueba, o enviar inmigrantes que se encuentran en EE. UU. a otros países utilizando aviones fletados. Desde que llegó a la Casa Blanca, el pasado 20 de enero, ha sido un constante tira y afloja entre la nueva administración y decenas de organizaciones que han denunciado sus decisiones por no ajustarse a derecho.

Su última contienda judicial ocurrió hace una semana. El mandatario norteamericano envió a El Salvador 137 venezolanos que se encontraban en EE. UU. Lo hizo bajo la Ley de Enemigos Extranjeros, un recurso legal excepcional que solo se ha invocado 3 veces en la historia del país y siempre en tiempos de guerra. Su administración hizo oídos sordos a una orden judicial que prohibía estos vuelos, y por eso el magistrado pidió un informe para entender porque no se había cumplido la orden, pero la Casa Blanca también ignoró esta petición alegando que se trataba de una ¨pesca judicial innecesaria¨.

Más tarde, el Departamento de Justicia presentó un informe que no respondía a lo que se les preguntaba y Donald Trump incluso fue más allá, volcando su enfado en el juez que le estaba contradiciendo, James E. Boasberg, un magistrado nominado por el expresidente demócrata Barack Obama. Desde hace días se ha enfrentado a calificativos como ¨marxista¨, ¨simpatizante del terrorismo¨, y varios ataques que llegan de los partidarios del líder republicano y su séquito de fieles como la fiscal general Pam Bondi, que le ha acusado de ¨inmiscuirse en nuestro gobierno¨, planteando abiertamente la duda de ¨ por qué el juez intenta proteger a los terroristas que invadieron nuestro país por encima de los ciudadanos estadounidenses¨.

El magistrado le ha dado a Trump hasta el próximo martes para que explique por qué los funcionarios no siguieron sus indicaciones y permitieron que los vuelos con venezolanos despegaran. ¨El gobierno ha vuelto a eludir sus obligaciones¨, señaló en su escrito asegurando que la primera respuesta a su petición sobre estos vuelos era ¨lamentablemente insuficiente¨.

Por su parte, el presidente republicano ha pedido un impeachment (juicio político) contra él, lo que ha obligado al líder de la Corte Suprema, John Roberts, a intervenir y en una declaración inusual ha asegurado que ¨no es la respuesta apropiada a un desacuerdo sobre una decisión judicial¨. Para él también ha habido ataque por parte del mandatario, que ha insinuado que la Corte Suprema ¨estaba comprometida con los ¨sesgos políticos¨.

Al cierre de esta edición todavía no había comenzado una audiencia prevista en Washington este viernes para decidir si el juez actuó correctamente prohibiendo a Trump hacer uso de la Ley de Enemigos Extranjeros aprobada en 1798. La Casa Blanca acusa a Boasberg de extralimitarse en su poder para interferir en la agenda del presidente, pero el magistrado se defiende asegurando que pausó la extradición de los venezolanos para asegurarse que no se estaba cruzando ninguno de los límites que establece la propia norma sobre cuándo y cómo puede usarse.

Trump ha cruzado ya líneas nunca exploradas, así que muchos se preguntan cuáles podrían ser las consecuencias para su equipo si siguen ignorando las normas judiciales. Un juez podría declarar a los funcionarios en desacato, pero ¿podría el inquilino de la Casa Blanca indultarlos? No está claro. Los expertos apuntan a que los jueces tienen ¨poca autoridad real¨ en este caso para hacer cumplir sus órdenes, y The New York Times apunta a que los juristas están preocupados por las consecuencias de sí que podría tener que la Casa Blanca siga desobedeciendo, lo que podría ¨conducir a una crisis constitucional¨.

Trump, un hombre de negocios, llega a acuerdos haciendo uso de la casi ilimitada autoridad de su cargo. Este viernes se conoció que el mandatario acaba de cerrar un acuerdo con un bufete de abogados contra el que había emitido una orden ejecutiva. La Casa Blanca la retira y a cambio el despacho representará a la administración en causas que Trump defiende, como combatir el antisemitismo y otros proyectos acordados.

Se está preparando para una cruzada que se sospecha larga y que está afectando incluso a la vida personal de los jueces del país. Muchos ya han manifestado su preocupación ante una ola de amenazas digitales por desafiar las políticas de Trump y temen que la situación pueda empeorar y derive en violencia en la vida real. ¨Siento que la gente está jugando a la ruleta rusa con nuestras vidas¨, explica en una entrevista con The New York Times la jueza Esther Salas. Su caso ocupó todos los titulares cuando su hijo Daniel, de 20 años, fue asesinado por un lunático abogado que no estaba de acuerdo con como Salas había manejado una demanda.