Fillon busca el perdón con una carta

Los manifestantes aguardan en los mítines al candidato, que no remonta en los sondeos

François Fillon estaba ayer en Athis-Mons, al sur de París, visitando un centro de vigilancia urbana para hablar de las propuestas de su programa en seguridad: la creación de un gran ministerio de seguridad nacional, que el Estado financie el 50% de la compra de cámaras de seguridad, el refuerzo de los poderes de la Policía municipal, que se aprenda en los colegios el respeto a la autoridad o que se reduzca el tiempo en la aplicación de penas para sancionar a los delincuentes.

Por la mañana, había publicado una carta en «Ouest-France», dirigida a los lectores, en el mismo tono que la conferencia de prensa que ofreció el lunes: «Estupefacto» por «la furia de las fuerzas desencadenadas» contra él, comprensivo por «la profunda inquietud» que han despertado las informaciones entre los electores, e insistiendo en que «todo es legal». Sin embargo, su palabra resulta inaudible. A su llegada a Athis-Mons, le esperaban algunas personas con pancartas en las que se leía «Devuelva el dinero de nuestros impuestos» y «La impunidad cero debe ser la norma #Fillon». La víspera viajó a Troyes y se repitió la escena.

La contratación de su esposa como asistente parlamentaria y los negocios de su consultora «2F» volvieron a ser ayer objeto de nuevos comentarios. BFM Business indicó que Fillon ganó unos 200.000 euros brutos durante dos años de trabajo para la aseguradora AXA, dirigida por uno de sus amigos, Henri de Castries. Para la líder del Frente Nacional, Marine Le Pen, no hay dudas de la connivencia entre los dos: «El programa de Fillon, especialmente la supresión de la Seguridad Social, es como por casualidad beneficiaria para las grandes compañías de seguros porque se trata de que las mutuas sustituyan a la Seguridad Social». Fillon precisó ayer que el trabajo que realizó para AXA no tiene ninguna relación con las cuestiones sanitarias.

Pero Fillon aparece sancionado por la mayoría de la opinión pública, y los sondeos indican que el «mea culpa» realizado el lunes no les ha hecho cambiar de opinión. Un sondeo publicado ayer por «L’Express» confirma las últimas tendencias: que el candidato de Los Republicanos quedaría en un tercer puesto y, por tanto, sería eliminado en la primera vuelta, con un 18%, mientras que se clasificarían para la segunda Marine Le Pen (26%) y Emmanuel Macron (22,5%). Sin embargo, él cree que tiene una oportunidad: «Tenemos una base pequeña pero muy sólida», comentó Fillon ayer a «Le Point». «Hay un electorado de derechas que no tiene ninguna gana de votar a otro que no sea un candidato de derechas».

Los disturbios se extienden al norte de París

Los incidentes que en los últimos días han sacudido la localidad de Aulnay-sous-Bois tras la presunta agresión policial a un joven negro se extendieron ayer a otros municipios de la periferia de París. Al menos 17 personas fueron arrestadas en varias localidades del norte de la capital, aunque el número de disturbios disminuyó. En Aulnay-sous-Bois, epicentro de la protesta, se vivió sin embargo una madrugada de calma. Fue aquí donde el pasado jueves una patrulla arrestó en un control a Théo, de 22 años. Pero según denunció el joven, los agentes le agredieron y le violaron con una porra extensible, lo que obligó a operarle en un hospital. El asunto, que ha provocado un gran revuelo en Francia, fue seguido de varias noches de disturbios en Aulnay-sous-Bois que ayer se extendieron a otras localidades.