Rusia
¿Por qué Putin no destituye a Shoigu tras la rebelión de Prigozhin y el grupo Wagner?
La actuación del ministro de Defensa, o la falta de ella, en esta crisis lo ha dejado en muy mal pie, pero ya se sabe que Putin no se caracteriza en tomar decisiones rápidas
El ministro Defensa ruso, Serguei Shoigu, es un gran amigo del jefe de Kremlin, Vladimir Putin, quien en varias ocasiones lo ha elegido como compañero de vacaciones, ampliamente publicitadas, y hasta ahora era poseedor de una aura de incombustible.
Sin embargo, su falta de repuesta a la rebelión de los mercenarios del grupo Wagner encabezada por su líder, Yevgueni Prigozhin, ha supuesto para Shoigu un golpe, sin duda más duro que los reveses del Ejército ruso en Ucrania, por los que él y la cúpula militar han sido duramente criticados desde los sectores ultrapatriotas
¿Por qué Putin no ha cesado aún a Shoigu? La actuación del ministro de Defensa, o la falta de ella, en esta crisis lo ha dejado en muy mal pie, pero ya se sabe que Putin no se caracteriza en tomar decisiones rápidas y menos bajo la presión de los acontecimientos, por lo que sorprendería una destitución en caliente.
El líder de Wagner, Prigozhin, no solo criticó cómo se está librando la guerra contra Ucrania y a qué coste, sino también cómo el Kremlin justifica la guerra. Algunos expertos argumentan que las acusaciones contra Shoigu y el jefe del Estado Mayor, Valery Gerasimov, están en cierto modo justificadas y la guerra le está saliendo muy mal a Rusia. Pero muchas de las acusaciones de Prigozhin conciernen específicamente a Putin, que invadió Ucrania con pretextos inventados.
Shoigu es un ministro de Defensa civil. Los oficiales militares son responsables de los fracasos a varios niveles. Sin embargo, es el presidente quien debe responder por los errores estratégicos y los objetivos no alcanzados. Putin no puede destituir inmediatamente a Shoigu porque sería una señal de debilidad. De hacerlo, estaría cediendo ante Prigozhin, a quien ha acusado de traición.
Con respecto a las posibilidades de que Shoigu sea el sucesor de Putin en un futuro, los expertos lo ven poco probable por dos razones. En primer lugar, Shoigu es casi tan viejo como Putin y un nuevo presidente tendría que proceder de la generación más joven. En segundo lugar, el potencial de Shoigu para convertirse en presidente ruso también está limitado por el hecho de que no es ruso étnico. En este sentido, Shoigu es un ministro de Defensa muy seguro y un confidente de Putin respetado y popular.
El ministro de Defensa, de 68 años, procede de un entorno acomodado en la nomenklatura soviética. En los últimos años de la Unión Soviética, Shoigu fundó y dirigió el servicio estatal de salvamento. Cuando éste se convirtió en el Ministerio de Gestión de Catástrofes, estuvo al frente durante casi 20 años.
A finales de la década de 1990, Shoigu fue considerado el ministro más popular de Rusia y lideró el entonces nuevo partido del Kremlin, Unidad -precursor del actual partido Rusia Unida-, en las elecciones a la Duma Estatal.
En 2012, inmediatamente después de que Putin volviera a ocupar el cargo de primer ministro, Shoigu se convirtió por primera vez en gobernador de la región de Moscú. Solo unos meses después, fue nombrado ministro de Defensa e inició las reformas.
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