Controversia

Por qué Noruega permitirá la explotación minera en el fondo del mar pese a ser "un modelo del ecologismo"

El país nórdico se convierte en el primero del mundo en aprobar esta controvertida práctica, que podría tener graves efectos en el agua, las especies marinas o los seres humanos

Noruega se convirtió en el primer país en autorizar la polémica práctica de la minería en aguas profundas a escala comercial
Noruega se convirtió en el primer país en autorizar la polémica práctica de la minería en aguas profundas a escala comercialDreamstime

Nuestro planeta se encuentra en una crisis climática que con el paso de los años, las consecuencias son cada vez más notorias. Aumento considerable de las temperaturas, subida del nivel del mar o la pérdida del hielo del Ártico son algunas de las amenazas a las que la población nos enfrentamos en los tiempos que corren, por lo que las autoridades gubernamentales emprenden medidas para revertir la situación. No obstante, en Noruega, se ha aprobado una polémica medida que va en contra de las necesidades del clima y puede ser perjudicial para el mar, las especies marinas y, por ende, los seres humanos: la ejecución de la explotación minera en fondos marinos.

A principios de mes, el gobierno noruego anunció un histórico (pero controvertido) acuerdo con dos fuerzas de la oposición para aprobar un plan que permitirá la apertura progresiva de los fondos marinos a la práctica de la minería. El plan está diseñado para que esta práctica tenga lugar sobre aguas noruegas, aunque no se descarta un acuerdo próximo en el que la minería también pueda tener lugar en aguas internacionales.

Las profundidades del mar albergan rocas que contienen minerales como litio, escandio y cobalto, fundamentales para las tecnologías limpias o las baterías. Y aunque estos minerales están disponibles en tierra, están concentrados en unos pocos países. Así, Noruega sería el primer país del mundo en ejecutar esta controvertida y polémica práctica.

El objetivo de estas negociaciones se centra en abrir primero a la explotación un área de unos 280.000 kilómetros situada en el mar de Barents y el mar de Groenlandia, en el Océano Ártico.

Así es el polémico plan de Noruega para explotar minerales del fondo del mar: la controversia del país más ecologista de Europa

Noruega es el mayor productor de energía hidráulica en Europa y ha logrado implementar un sistema eléctrico "único", ya que se alimenta en un 98% de fuentes renovables. Un sueño para los ecologistas que parece torcerse con una decisión que compromete a la vida marina, según científicos ambientales, que anuncian que los efectos pueden ser "devastadores".

Según la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN), las técnicas para recolectar minerales del fondo marino podrían generar una importante contaminación acústica y lumínica. Las críticas no tardaron en tener lugar, sobre todo por parte de sociedades ecologistas, tales como GreenPeace, que se refirió como "una catástrofe para el mar", mientras que la Sociedad Noruega para la Conservación de la Naturaleza tachó de "locura" la intención de ejercer esta práctica.

Asimismo, las discrepancias aumentaron después de que los firmantes aseguraran que "hay millones de toneladas de minerales como cobre, zinc y cobalto que se pueden explotar sin perjudicar al planeta y de una forma rentable y sostenible". No obstante, se estima que harían falta entre cinco y diez años de investigación para entender los impactos en las especies y a partir de ahí, diseñar la práctica con los menores riesgos posibles.

Por otro lado, la decisión de la explotación minera en fondos marinos le ha hecho enfrentarse al rechazo de la propia Unión Europea y el Reino Unido, quienes han solicitado una prohibición temporal debido a las preocupaciones existentes sobre posibles daños ambientales. E incluso miembros del propio gobierno noruego la han tachado de "peligrosa". "El gobierno había hecho suposiciones basándose en una pequeña área de investigación y las había aplicado a toda el área planificada para la perforación", explica el Instituto Noruego de Investigación Marina, según indica BBC.

No es la primera vez que Noruega, que es un ejemplo a seguir en materia de ecologismo y protección del medio ambiente, ha sido tachado de "hipocresía". Y es que aunque ha prometido la "neutralidad climática" para 2030 y es uno de los mayores patrocinadores de proyectos verdes, también es uno de los principales exportadores de petróleo y gas del mundo -el mayor de Europa occidental-, con los costos medioambientales que eso conlleva.