EE UU

Economía, Ucrania y reelección: ¿qué se espera del discurso del Estado de la Unión de Biden?

El presidente hará balance de su Administración pero pondrá énfasis en sus motivos para continuar un segundo mandato

El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, se dirigirá a la nación en la noche del jueves en el tradicional discurso del Estado de la Unión con la resaca de un Supermartes electoral que no dejó sorpresas: él y Donald Trump reeditarán en noviembre el mismo cara a cara que ya protagonizaron hace cuatro años. El líder demócrata no tuvo rival en las primarias y el expresidente frenó en seco las aspiraciones de su única rival interna en liza, Nikki Haley, después de ganar con holgura en catorce de los quince estados que acudieron a las urnas.

Este ha sido el ingrediente que le faltaba al discurso anual del Estado de la Unión ante la sesión conjunta del Congreso, que se ha convertido para Biden en una oportunidad de oro para presentar los logros de su Administración en pleno año electoral. Pero el fondo de su mensaje no se quedará ahí. Necesitará exponer sus argumentos en un escenario delicado en el que las encuestas no le son favorables y colocan a Trump como principal favorito.

También tendrá que responder a las dudas sobre su capacidad para ocupar de nuevo el cargo por su avanzada edad, que empiezan a sonar cada vez con más fuerza entre sus propias filas. Y se espera que haga balance de la economía, hable de la crisis migratoria en la frontera, subraye la importancia de actuar en las guerras de Ucrania y Gaza para, finalmente, presentar sus planes para un eventual segundo mandato, según adelantó el jefe de gabinete de la Casa Blanca, Jeff Zients, en el programa Morning Edition de la emisora NPR.

Preguntado sobre el contenido del discurso, Zients habló de «reducir los costes, seguir mejorando la vida de la gente invirtiendo en guarderías, atención a la tercera edad, bajas médicas y familiares remuneradas, y seguir avanzando en la reducción de la deuda estudiantil», pero resaltó otro aspecto clave: «El presidente también va a pedir que se restaure el caso Roe contra Wade y que se dé libertad a las mujeres para decidir sobre su atención sanitaria. Y hablará de proteger, no de quitar, las libertades en otras áreas, así como el derecho al voto». Hasta ahora, el equipo de campaña de Biden ha centrado los mensajes en frenar las aspiraciones de Trump.

Llamamiento al consenso

Los republicanos del Congreso han bloqueado con la connivencia de Trump la ayuda exterior a Ucrania e Israel, así como un proyecto de ley histórico sobre seguridad fronteriza. Por eso, Zients reconoció que «va a ser difícil» avanzar en la tramitación legislativa de estas medidas sin contar con el consenso bipartidista. De ahí que Biden, según avanzó, vaya a utilizar su discurso para instar a los legisladores a actuar con urgencia.

La Casa Blanca prioriza la aprobación del acuerdo de seguridad nacional de 118.000 millones de dólares con financiación para Israel y Ucrania, aprobado en el Senado pero pendiente de debatirse en el Congreso, y del proyecto para dotar de recursos la gestión de la crisis migratoria en la frontera con México. «Dejaré que el presidente de la Cámara hable por sí mismo, pero lo que sí sé es que la necesidad es urgente y que hay apoyo bipartidista en la Cámara, y si se presenta, se convertirá en ley», dijo Zients en alusión al republicano Mike Johnson, señalado por obstruir el debate en el Congreso. «Y creo que eso es lo que tiene que ocurrir. Y van a oír al presidente presionar al Congreso para que haga precisamente eso en el Estado de la Unión».

Guerra en Gaza

Especialmente delicadas para Biden serán sus referencias a la delicada situación que atraviesa Oriente Próximo cuando se cumplen cinco meses de guerra en la Franja de Gaza, donde han muerto más de 30.700 personas y el 75% de la población ha sido desplazada en el marco de la operación israelí en respuesta a la masacre de Hamás del 7 de octubre.

La gestión de la Administración Biden ha molestado, y mucho, a decenas de miles de votantes tradicionales del Partido Demócrata que se declaran «no comprometidos» por la incapacidad de la Casa Blanca de desbloquear un alto el fuego inmediato en Gaza. Las primarias demócratas de la pasada semana en Míchigan fueron buena muestra del descontento en sus filas. Un sector nada desdeñable del electorado, que incluso podría ser decisivo, amaga con no votar por Biden en noviembre. Por eso importan las declaraciones del presidente.

Sobre esta cuestión, su jefe de gabinete adelantó que Biden tratará de dejar claro que Israel tiene derecho a proteger a su pueblo y a «degradar a Hamás», al tiempo que abordará la cuestión del número de víctimas civiles inocentes en la Franja.

Plan fiscal

Se espera que Biden detalle, además, una batería de medidas para capear los problemas sanitarios, estudiantiles y aquellos relacionados con el elevado coste de la vivienda. Apelará a los esfuerzos de su Administración para combatir la subida de precios y anunciará un nuevo plan para aumentar los impuestos sobre las empresas y los ricos en el marco de una nueva política fiscal, según adelanta la CNN.