Oriente Medio
"Me dirijo a vosotros, la gente de Irán": Netanyahu recurre a la guerra psicológica para fabricar un caballo de Troya
Difunde por redes sociales un vídeo destinado a animar al cambio político en la república islámica: "Cuando sus líderes caigan todo será diferente, y esto ocurrirá mucho antes de lo que la gente piensa"
"Me dirijo a vosotros, la gente de Irán". Así comienza un vídeo de tres minutos de duración que el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, ha difundido en redes sociales para animar a los ciudadanos de la república islámica a hacer algo con lo que tanto Israel como Occidente sueñan desde hace tiempo: que una revolución interna derribe a los ayatolás e instaure una democracia en la nación más temida de Oriente Medio.
La estrategia del premier israelí, con pocas posibilidades de salir adelante pero con mucho significado político, responde a la antigua táctica militar de la guerra psicológica dirigida a minar la moral del enemigo desde dentro. De paso, pretende introducir un Caballo de Troya dentro de Irán que ayude a canalizar el descontento contra el régimen que a buen seguro subyace en una parte de la sociedad. Exista o no esta oposición interna, lo cierto es que el régimen teocrático ha conseguido hasta ahora someter con mano de hierro cualquier contestación interna, ya sea para pedir más libertad o para reclamar el fin de la obligatoriedad del velo.
Mirando fijamente a la cámara, sentado en su despacho y con una bandera de Israel a la derecha de la imagen, Netanyahu hace una exhortación para ganarse el favor de los iraníes contrarios a su régimen.
"Me quiero dirigir así a vosotros sin filtros, sin intermediarios. Cada día veis a un régimen que subyuga vuestros derechos y que hace fieros discursos en defensa de Líbano y de Gaza, pero empuja a la región a una situación cada vez más oscura y más próxima a una guerra", afirma el mandatario israelí.
"Cada día, sus marionetas son eliminadas. Preguntádselo a Mohamed Deif. Preguntádselo a Nasrala", explicó Netanyahu en referencia al líder militar de Hamás en Gaza y al líder de Hizbulá. Y lanzó una advertencia aupado por los últimos éxitos militares: "No hay un solo objetivo que Israel no pueda alcanzar".
En su alocución, Netanyahu menciona algunas localidades del país (otro recurso muy utilizado en este tipo de mensajes para aumentar la cercanía con el receptor) y se dirige expresamente a los "decenas de miles de iraníes decentes que saben que merecen algo mejor".
Netanyahu criticó a los líderes iraníes por "malgastar miles de millones de dólares en guerras inútiles" en lugar de mejorar las vidas de sus ciudadanos y esbozó cómo sería el país cuando sus líderes caigan. "Todo será diferente, y esto ocurrirá mucho antes de lo que la gente piensa", añadió. Detrás de todo su discurso, un mensaje: "Israel está con vosotros".