Ofensiva en Rafah

El dilema de Netanyahu: romper el gobierno o reconducir las relaciones con EE UU

Las tensiones políticas y militares entre los dos íntimos aliados no son nuevas pero a diferencia del pasado, en esta ocasión se han hecho públicas

AMP.- O.Próximo.- Netanyahu recalca que la tregua aceptada por Hamás está "muy lejos" de las demandas de Israel
El primer ministro israelí, Benjamín NetanyahuEuropa Press

Estados Unidos condicionó su ayuda militar en munición ofensiva a Israel a que no emprenda una “operación militar importante” en la densamente poblada ciudad de Rafah, al sur de Gaza. Donde ahora hay 1.2 millones de palestinos refugiados de otras zonas del enclave, huidos de la guerra.

No es la primera vez que EE UU amenaza o lleva a cabo restricciones en sus envíos militares a Israel. Casi desde el comienzo de la relación entre ambas naciones hubo tiras y aflojas, frente a las actitudes israelíes que los estadounidenses interpretaron como inflexibilidades, las consecuencias fueron restricción en material militar.

En la crisis del Canal de Suez en 1956elpresidente Eisenhower amenazó con sancionar a Israel, años más tarde, un presidente dijo a su secretario de Estado: “Estados Unidos no se aislará del resto del mundo para respaldar la intransigencia israelí”. Era Gerald Ford a Henry Kissinger cuando en marzo de 1975 EE UU intentaba mediar un acuerdo de retirada del Sinaí entre Israel y Egipto, después de la guerra de Yom Kipur, de 1973. Las discusiones interminables y demoras israelíes llevaron a la Administración Ford a retrasar el suministro de aviones F-15.

También hubo incidentes en los años 80 e incluso en la guerra en curso. El analista Alon Pinkas señaló en el diario Haaretz que en todos los casos fueron demoras específicas y temporales que sucedieron en silencio y cuya intención era enviar un mensaje sin dañar la relación.

Lo diferente de la crisis actual es que se ha hecho pública

El envío retenido incluye 1.800 bombas de 907 kilos, 1.700 bombas de 226 kilos y posiblemente kits JDAM, la munición que convierte las bombas "tontas", las que causan daños indiscriminados, en bombas guiadas de precisión. Sin embargo, hay que recordar que el presidente estadounidense, Joe Biden, dijo en la misma entrevista en CNN en la que anunciaba que pausaba esa remesa, que no se detenía ninguna ayuda defensiva a Israel. Además, en el mes de abril el Congreso aprobó la solicitud de Biden de un acuerdo de emergencia sobre armas por valor de 14.000 millones de dólares para Israel, y la semana pasada autorizó un envío de munición por valor de 827 millones de dólares.

Los analistas señalan que el freno de Biden se debe a la actitud de Netanyahu, que ignora y ningunea los pedidos de su aliado además de que no presenta ningún plan para la Gaza del día de después. Este viernes, el Gobierno de Estados Unidos afirmó que es posible que el Ejército de Israel haya empleado en Gaza armas proporcionadas por Washington de manera "incompatible" con el Derecho Internacional Humanitario en los siete meses que lleva en marcha la operación militar israelí sobre la Franja. El Departamento de Estado admitió en un informe que "es razonable evaluar que las fuerzas de seguridad israelíes han utilizado artículos de defensa cubiertos por la 'NSM-20' desde el 7 de octubre en casos incompatibles con sus obligaciones en materia de Derecho Internacional Humanitario o con las mejores prácticas establecidas para mitigar los daños a civiles".

A pocos días del Día de la Independencia israelí, Netanyahu dijo: “Durante la Guerra de Independencia, hace 76 años, éramos pocos contra muchos. No teníamos armas, había un embargo de armas a Israel, pero con la fuerza del alma, la valentía y la unidad dentro de nosotros, ganamos. Hoy somos mucho más Fuertes. Estamos decididos y unidos para derrotar a nuestro enemigo y a quienes buscan destruirnos. Si tenemos que estar solos, lo estaremos”, en referencia a la pausa del envío de munición estadounidense.

En la misma línea, el ministro de Finanzas, Bezalel Smotrich, tuiteó: "Cuando se estableció el Estado de Israel, nos vimos obligados a declararlo a pesar de la fuerte oposición de Marshall, el Secretario de Estado de la Administración Truman. También tuvimos que enfrentar una guerra con un embargo implementado por los Estados Unidos”.

"Una vez más, hoy lograremos una victoria completa en esta guerra a pesar de la reacción y el embargo de armas del presidente Biden. Simplemente no tenemos otra opción, ya que esta guerra es existencial y cualquier otra cosa que no sea una victoria completa pondrá en peligro la existencia del Estado judío. peligro", continuó Smotrich.

¿De veras peligro existencial?

La obligatoriedad de la entrada militar en Rafah es algo muy discutido en Israel. Si Netanyahu alberga un dilema al respecto, será por la presión estadounidense e internacional en contra y la del extremo derecha de su coalición de gobierno que presiona para que sí se lleve a cabo. Pero es que también están los militares que indican que es el paso adecuado, para acabar con los batallones de Hamás que restan y tratar de liberar a los rehenes, y los militares que dicen que esos batallones no son relevantes y que el costo de esa operación será más grande que los beneficios, ya que no es una ciudad estratégica.

El Ejército israelí ordenó este sábado la evacuación de la población civil de más áreas del este de Rafah, seis días después de iniciar la operación militar en esa ciudad de sur de la Franja de Gaza, así como de varios puntos del norte del enclave, donde alega que Hamás reconstruye sus capacidades. La orden de evacuación afecta a los campamentos de Rafah y Shabura, así como a los barrios de Adari y Jeneina; a los que se les ha pedido que se dirijan al "área humanitaria" de Al Mawasi, una zona costera ya saturada de desplazados en tiendas de campaña improvisadas, sin agua corriente ni saneamiento.

"Israel no puede jugar sin EE UU"

“Yo también estoy trabado con este dilema”, dice Alberto Spektorowski, profesor de ciencias políticas de la Universisdad de Tel Aviv. “Porque veo que los propios expertos militares están divididos”.

Spektorowski opina que si Israel entra con todo en la ciudad sureña de Gaza “Netanyahu se quedará en el poder, manejando esta guerra inacabable, e Israel se quedará más aislada que Rusia. Sin el apoyo americano. Soy bengurionista en este sentido, pienso que Israel no puede jugar sin EEUU”.

La displicencia de Netanyahu con Biden puede deberse, según el académico, al deseo del primer ministro israelí de que se produzca un cambio de gobierno en su aliado.

Spektorowski opina que la falta de diseño de un plan para la Gaza del día después por parte del mandatario israelí obedece a que el gobierno de Netanyahu prefiere a un Hamás debilitado en la franja, pero a Hamás y no a otra organización.

Por eso, el experto se inclina a pensar que la entrada militar israelí en Rafah se quedará en el balbuceo en el que se encuentra en estos momentos.

“Siwnar sabe que están jugando”, dice el profesor refiriéndose al líder de Hamás en Gaza, Yahiya Sinwar. “Que están haciendo demostraciones, como para presionar para la negociación, pero no me parece que Sinwar se deja impresionar. Sabe que Israel se tiene que rendir. Y está tranquilo ahí, esperando”.

Este experto, y otros, señalan que esta guerra puede ser larga. Esa vaguedad puesta en cifras, cinco años, diez años, cobra una dimensión insoportable para las familias de los rehenes cautivos en Gaza, por no decir de los gazatíes bajo las bombas israelíes. “Y esa extensión en el tiempo le viene bien a Sinwar y le viene bien a Netanyahu”, afirma Spektorowski.

Netanyahu no desesa fuerzas internacionales en Gaza porque eso le serviría a Hamás, “que puede continuar siendo lo que es porque las fuerzas internacionales no lo censurarían”, dice el académico. “La Autoridad Nacional Palestina (ANP) no quiere estar en Gaza y si estuviera, redundaría en beneficio de Hamás, que podría ser ‘el irresponsable’ y la que se llevaría las culpas de que la cosa no funcione sería la ANP”

Y, así, se crea el pacto de los malvados, entre el liderazgo israelí y el de la franja, con una vuelta al panorama del 6 de octubre, describe Spektorowski. “Más de lo mismo, y por muchos años”, lamenta el profesor.