Estados Unidos

Primera derrota de Trump: su polémico fiscal general renuncia

Matt Gaetz, acusado de abuso sexual de menores, era criticado por una buena parte de los republicanos

En las últimas horas, el presidente electo de Estados Unidos Donald Trump sufrió su primera derrota en la pugna de poder que libra en su camino para formar gabinete. El controvertido exrepresentante Matt Gaetz, republicano de Florida, anunció que retiró su candidatura para ser fiscal general, después de que acusaciones de tráfico sexual y consumo de drogas amenazaran con poner en peligro su confirmación en el Senado.

Tras reunirse con senadores republicanos para discutir su nominación, Gaetz, un conservador polémico ultra defensor leal de Trump, escribió el jueves en las redes sociales que "es evidente que mi confirmación se estaba convirtiendo injustamente en una distracción para el trabajo crítico de la Transición Trump/Vance".

"No hay tiempo que perder en un enfrentamiento innecesariamente prolongado en Washington, por lo que retiraré mi nombre de la consideración para servir como Fiscal General", continuó.

Desde el principio, la nominación de Gaetz enfrentó controversias debido a las acusaciones de que participó en fiestas sexuales, usó drogas ilegales y tuvo relaciones sexuales con una menor. El FBI investigó estos cargos desde 2021, pero el Departamento de Justicia nunca presentó una acusación que tuviera camino a un proceso judicial mayor.

Sin embargo, el Comité de Ética de la Cámara de Representantes de EE.UU. llevó a cabo su propia investigación sobre el asunto, que estaba programada para ser publicada antes de que Gaetz renunciara abruptamente a la Cámara, lo que efectivamente frustró los planes de ese órgano. Gaetz ha insistido en que no hizo nada malo y señaló el cierre del caso del Departamento de Justicia como evidencia de que las acusaciones carecían de fundamento.

El comité de ética, en una reunión el miércoles, quedó en un empate sobre si debía publicar su informe sobre un exmiembro. En un escandaloso reporte del New York Times, se detalla que investigadores federales habrían establecido una red de pagos entre Gaetz y docenas de amigos y asociados que habrían participado de esas fiestas.

Según este reporte, entre los que recibieron dinero de Gaetz se encontraban dos mujeres que han testificado que él las contrató para tener relaciones sexuales con un pago de alrededor de 10.000 dólares.

Las horas previas a esta decisión sobre el retiro han sido frenéticas. Gaetz estuvo en el Capitolio el miércoles reuniéndose con los senadores republicanos que probablemente habrían determinado su destino como nominado para liderar el Departamento de Justicia. Varios han dicho que quieren ver el informe del Comité de Ética de la Cámara como parte del proceso de confirmación, pero generalmente han sido cautelosos con respecto a su nominación.

Por su parte, otros dijeron públicamente que enfrentaba una batalla difícil y tendría que responder preguntas difíciles durante el proceso para poder hacerse con las llaves de un Departamento al que además había prometido reformar bajo las dudas sobre si lo utilizaría o no para perseguir a los adversarios políticos de Trump, como sugirieron durante este tiempo algunos demócratas.

No está claro si Gaetz puede regresar al Congreso ahora, ya que renunció a la sesión actual pero ya había sido elegido para la próxima sesión por su distrito en Florida, o si Trump le dará otro puesto en su administración.

Justo después de su retiro, el mandatario electo le dedicó un mensaje en su red social Truth, en el que le agradeció por su servicio y le deseó suerte en su futuro, resaltando efectivamente que la decisión tenía que ver con la difícil batalla para la confirmación.

Algunos legisladores se habían atrevido a sugerir que Trump podría haber querido usar a Gaetz para facilitar la aprobación de algunas de sus otras nominaciones controvertidas, como Robert F. Kennedy Jr., nominado para liderar el Departamento de Salud y Servicios Humanos, y la exrepresentante Tulsi Gabbard (Hawái), nominada para servir como directora de inteligencia nacional, durante el proceso de confirmación. Y es que tras esta polémica, ninguno de los otros personajes luce tan controversiales.

Hasta esta entrega Trump no había anunciado un nuevo nombre para el cargo. De momento, el mandatario electo ha informado sobre al menos 28 personas para ocupar puestos de alto nivel en su próxima administración, incluidas sus elecciones para liderar los departamentos de Estado, Defensa, Seguridad Nacional y Comercio, así como su director de inteligencia nacional y su asesor de seguridad nacional, entre otros.