País Vasco
35 etarras se unen al secuestrador de Ortega Lara en huelga de hambre
Garitano se reúne hoy con la familia de Uribetxebarria para apoyar su libertad
San Sebastián- Treinta y cinco presos de ETA encarcelados en España y Francia han comenzado una huelga de hambre en solidaridad con su compañero Iosu Uribetxebarria, uno de los secuestradores de Ortega Lara, que se encuentra internado en el hospital Donostia de San Sebastián aquejado de un cáncer y que también se niega a ingerir alimentos hasta que se decrete su libertad. Según informó Etxerat, la asociación que agrupa a los familiares de los reclusos de la banda terrorista, estos presos están internos en las cárceles francesas de Villefranche-sur-Saône y Fresnes y en las españolas de Sevilla II y Castellón II. Sin embargo, al cierre de esta edición Instituciones Penitenciarias no tenía constancia de que los reclusos de ETA hubiesen comenzado una huelga de hambre en solidaridad con Uribetxebarria, informa Efe.
Los últimos en adherirse a la protesta de este preso han sido siete reclusos de ETA de la cárcel de Fresnes, que comenzaron la huelga de hambre la pasada medianoche.
Uribetxebarria, condenado por participar en el secuestro del funcionario de prisiones José Antonio Ortega Lara, permanece ingresado en el hospital Donostia para ser tratado de un cáncer, motivo por el que sus abogados han reclamado su puesta en libertad.
Tras ser operado de un tumor cancerígeno en un riñón en 2005, el etarra fue trasladado a Nanclares de Oca y, posteriormente, al centro penitenciario de León, donde el pasado julio le fue detectado otro tumor con metástasis en el cerebro. Durante ese tiempo, según Instituciones Penitenciarias, colaboró con los médicos para su seguimiento y tratamiento. Para determinar el alcance de la enfermedad, fue trasladado a un hospital de San Sebastián, donde, según esas mismas fuentes, «la actitud del interno ha cambiado y ha dejado de colaborar, negándose a que se le practique prueba alguna». Del mismo modo, añaden, «ha comenzado a rechazar la comida del hospital como protesta para exigir su excarcelación». Esa actitud impide, según Instituciones Penitenciarias, «profundizar en su diagnóstico y tratamiento y, en consecuencia, conocer su pronóstico vital» para adoptar cualquier decisión al respecto. Para Interior existen «presiones del entorno radical tanto al preso como a su familia para que adopte esa actitud» para poder utilizar su caso para presionar al Gobierno, algo similar a lo que ocurrió en su día con el etarra Iñaki de Juana Chaos, que también se puso en huelga de hambre para exigir su libertad.
Precisamente hoy, el diputado general de Guipúzcoa, Martin Garitano (Bildu), se reunirá con familiares de Uribetxebarria, así como con representantes de Etxerat y Herrira, la plataforma que ha convocado para mañana en San Sebastián una marcha de apoyo a los presos de ETA que está siendo investigada por la Audiencia Nacional. La portavoz foral, Larraitz Ugarte, avanzó que el Gobierno foral les mostrará su solidaridad y disposición a secundar las iniciativas para exigir su excarcelación.
Por otro lado, el fiscal superior del País Vasco, Juan Calparsoro, remitió ayer a la Audiencia Nacional la petición del delegado del Gobierno en el País Vasco, Carlos Urquijo, de que se prohíba la marcha de mañana a favor de los presos etarras en San Sebastián.
La AVT, contra la marcha de apoyo a presos etarras
La Asociación de Víctimas del Terrorismo (AVT) se sumó ayer a la petición de Dignidad y Justicia (DyJ) y reclamó a la Audiencia Nacional que impida la celebración del acto de apoyo a los presos de ETA previsto para mañana en San Sebastián al considerar la concentración «una clara ofensa grave a la memoria de las víctimas». La AVT denuncia que la plataforma convocante «se dedica a apoyar a los presos de ETA y en estos momentos de manera expresa» a Iosu Etxebarria, uno de los secuestradores de Ortega Lara. La asociación recuerda que el derecho de reunión no es ilimitado y añade que, al convocarse para reivindicar los derechos de los presos, implica «admitir de forma implícita la inexistencia del respeto a dichos derechos», algo, subraya, «absolutamente alejado de la realidad». La AVT pide la prohibición de la marcha ante la previsible comisión de un delito de enaltecimiento del terrorismo.
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