Cuenca
Protesta sin vecinos contra el silo nuclear de Villar de Cañas
MADRID- Asistieron a la manifestación el secretario general de los socialistas de Castilla La Mancha, José María Barreda; el coordinador federal de Izquierda Unida, Cayo Lara; Raquel Montón, responsable de la campaña antinuclear de Greenpeace; y representantes de otras formaciones como Equo. Sólo faltó un colectivo: los propios vecinos del municipio de conquense Villar de Cañas, convocados, en teoría, para asistir a la protesta contra la ubicación del Almacén Temporal Centralizado (ATC) de residuos nucleares, cuya ubicación fue designada por el Consejo de Ministros el 30 de diciembre. De hecho, ni siquiera estuvo el alcalde José María Saiz, que, además de criticar que esta era la primera vez que Barreda, ex-presidente de la región, visitaba el municipio, pasó el día en una montería.
Así, con los vecinos de meros espectadores o directamente en sus casas, la manifestación, convocada por la Plataforma contra el Cementerio Nuclear en Cuenca y la Coordinadora Estatal Antinuclear, reunió a 5.000 personas según los organizadores y menos de 1.000 según la Delegación del Gobierno.
Por otro lado, el presidente de la Diputación de Cuenca, Benjamín Prieto, declaró el sábado a Barreda persona «non grata» porque «se manifiesta contra el progreso y el desarrollo de la provincia».
El municipio, de medio millar de habitantes, amaneció ayer con pancartas colgadas en su Ayuntamiento a favor de la instalación del cementerio, en las que se leía: «El ATC no es peligroso. En esto lo peor, lo peligroso, es la ignorancia, la desinformación y la manipulación de los ecologistas en acción. Nosotros vivimos en el campo y cuidamos de él». Sebastián, un vecino que sí acudió a la protesta, aseguró que la gente del pueblo se había quedado en casa «por miedo a que los vean manifestándose». Mientras, Juan Carlos, un joven en paro, confiaba en que el ATC podría suponer la creación de puestos de trabajo.
✕
Accede a tu cuenta para comentar