La última de las embarcaciones fue detectada por el instituto armado anoche sobre las 22:00 horas a unas doce millas al sur de Benalmádena, cuando se dirigía a la costa occidental de Málaga.

El servicio marítimo de la Guardia Civil se encontró con una pequeña embarcación de madera que corría el peligro de hundirse por sobrecarga, en la que viajaban dieciocho personas, todas mayores de edad y en buen estado de salud, según ha informado el instituto armado en una nota.

Ante el peligro de hundimiento de la embarcación, ya que la borda estaba rozando el agua y había viento de Poniente, los guardias civiles subieron a los inmigrantes a bordo de la patrullera, que los trasladó al puerto de Málaga para su posterior entrega al Cuerpo Nacional de Policía.

Previamente, diecisiete inmigrantes magrebíes fueron rescatados por miembros de Salvamento Marítimo de Tarifa (Cádiz) de una patera localizada al sur de Nerja (Málaga).

La embarcación fue localizada sobre las 21:30 horas y sus ocupantes, todos adultos y en buen estado de salud, fueron trasladados al puerto de la capital malagueña, donde llegaron pasada la una de la madrugada, según fuentes de Salvamento Marítimo.

Pese a que los servicios de emergencia inicialmente informaron de que se había interceptado una segunda patera en Nerja, finalmente han señalado que el rescate se ha producido en Benalmádena.

Los 35 inmigrantes localizados en las costas de Málaga se suman a otro rescate de treinta personas llevado a cabo horas antes por Salvamento Marítimo en Motril (Granada), tras avistar una embarcación sobre las 14:00 horas, a unas 40 millas al sur de la localidad granadina.

Los ocupantes de la patera, que llegaron sobre las 19:00 horas de ayer al puerto de Motril, eran varones de origen magrebí, aunque en este caso podría haber tres o cuatro menores, si bien esto deberá ser confirmado por pruebas oseométricas que determinarán su edad.