El Puerto de Santa María
La viuda de Alberti renuncia a presidir su fundación
Ayer, María Asunción Mateo puso fin a su trabajo como presidenta de la Fundación Rafael Alberti tras diecisiete años en el cargo.
La viuda del poeta gaditano ya había remitido una carta al alcalde de El Puerto de Santa María, Enrique Moresco, a principios del pasado mes de agosto en la que explicaba los motivos de su cese. Ante esta noticia, el edil le pidió que «reconsiderara su decisión», informa Efe. Un mes más tarde, Mateo ha vuelto a enviar la misiva en la que reafirma su postura inicial.
La viuda de Alberti alega «motivos personales» para dejar de desempeñar este cargo, una decisión que ha sido confirmada por la propia Fundación. En todo caso, el cese no se hará oficial hasta que no se convoque su patronato y elijan a un nuevo presidente. Según personas cercanas a esta institución, Mateo ha reducido al máximo las actividades relacionadas con su todavía cargo actual: «En los últimos días la viuda del poeta no ha acudido a las instalaciones de la Fundación y sólo ha realizado actividades ineludibles».
Incertidumbre
La decisión ha generado cierta inquietud en el seno del consistorio sobre el futuro de la Fundación y sus actividades, constituida en 1993, año que coincide con el 91 aniversario del poeta. Según Gonzalo Santonja, filólofo y asesor literario de esta institución hasta el fallecimiento del poeta, «la tarea principal que ha desarrollado la Fundación es recoger, archivar y publicar sus obras completas. Es la memoria, no sólo de la literatura española, sino del exilio. Alberti debe ser tratado como un clásico», asegura Santonja.
En todo caso, y ante la incertidumbre generada, Moresco explicó ayer que, «de momento, se están haciendo las gestiones oportunas. Estamos valorando las posibilidades que existen desde el trabajo que desempeña el área de Cultura de este Ayuntamiento».
Contexto de un desencuentro
- La edición de las obras completas que se pusieron en marcha con su centenario no tuvieron en cuenta una compilación anterior realizada por Luis García Montero.
- Desde que contrajo matrimonio con Alberti, Mateo consiguió apartar del poeta de El Puerto a los jóvenes escritores.
- La última edición de «La arboleda perdida» no cita a ninguna de estos jóvenes poetas, como García Montero y Benjamín Prado.
- La gestión de los derechos de autor del poeta, en posesión de su viuda y algunos hijos, sembró el malestar entre el círculo de Alberti por falta de control científico.