Capilla ardiente
Norma Duval, rota, dice adiós a su sobrino tras suicidarse con 36 años
La noticia ha sumido a la familia en la tristeza. No comprenden su decisión, cuando días antes estuvieron con él. Ahora lo lloran haciendo piña
La noticia de la muerte del sobrino de Norma Duvalha supuesto un disgusto mayúsculo para la vedette y su familia. Juan Carlos Rojas fallecía a la temprana edad de 36 años tras quitarse la vida, al encontrarse inmerso en una profunda depresión que arrastraba desde la muerte de su madre, Carla Duval, hace ahora catorce años.
No ha aguantado más y ha preferido retirarse, sumiendo con ello en la tristeza y el desconsuelo a sus seres queridos, especialmente a sus dos hermanas, que se enfrentan ahora a una nueva pérdida incomprensible. Todos han optado por refugiarse en su duelo y vivir en la más estricta intimidad la despedida a Juan Carlos, como así se está llevando a cabo este sábado 17 de agosto en el tanatorio de Tres Cantos de Madrid.
No han querido hacer demasiado ruido con el último adiós al sobrino de Norma Duval. Las circunstancias en las que se ha producido la muerte ha añadido más dolor si cabe a su partida: “Nadie se esperaba nada. Tenían planes para cenar el jueves y nadie detectó nada anómalo”, han asegurado fuentes familiares a la revista ‘Lecturas’.
Aun así, sabían que se encontraba en un momento anímico bajo, a pesar de que la vida le había convertido en padre hace tan solo dos meses atrás. La presión y la tristeza ha sido demasiada carga para él, y su familia ahora se apena de que no pidiese ayuda a tiempo para no tener que estar atravesando tan duros momentos, que les hacen reunirse ahora en un tanatorio para llorar.
La artista reaparecía dos días después de la muerte de su sobrino con el rictus serio, pero, tal y como han destacado desde la citada revista, haciendo gala de una actitud “muy profesional y entera”. Quizá por el delicado papel que le toca desempeñar, pues cuando murió su hermana quiso hacer las veces de madre con sus sobrinos. Ahora tiene que enterrar al mayor de ellos, mientras consuela a las gemelas y trata de ayudarlas a comprender lo injusta que es la vida a veces.
Una de las primeras en llegar ha sido Paula Paredes, hermana de Juan Carlos, que no podía contener las lágrimas a las puertas del tanatorio. Poco después lo hacían los hijos de Norma Duval, quienes han reconocido a su llegada que “no es una buena mañana”. La tristeza se adueñaba de sus rostros, pero trataban de guardar la compostura para ayudar a aquellos que no lograban tan difícil tarea a recomponerse.
Norma Duval ha tenido que refugiarse en sus seres querido al perder a su sobrino de forma tan trágica, a quien consideraba como un hijo más, al criarle como tal al morir su hermana víctima de un cáncer en 2010.