Poco o nada trasciende de la vida de Isabel Pantoja, después de que decidiese recluirse en Cantora para no hacer ruido y alejarse con ello del acoso mediático. La tonadillera está en horas bajas, especialmente resentida por haber perdido el cariño de sus dos hijos, Kiko Rivera e Isa Pantoja. También ha apartado de su entorno más directo a su hermano Juan y a muchas de sus amistades de toda la vida. De hecho, ya piensa en su funeral y ha puesto condiciones para despedirse de este mundo en soledad, sin que nadie llore su muerte. El perfil bajo que ha desplegado en los últimos meses ha llamado mucho la atención, causando una creciente preocupación por su estado anímico, pero también por su salud. Y es que parece que atraviesa un bache médico que le ha obligado a centrarse exclusivamente en ella y no tanto en lo que le rodea.

Así lo ha contado Paloma García Pelayo para el programa de Antena 3 ‘Y ahora Sonsoles’. Según la información que maneja, la cantante “está pasando por un momento muy delicado”, por lo que “se está cuidando y, por prescripción facultativa, decidió hace un tiempo desconectar”. Es decir, según la periodista, la desaparición mediática se debe exclusivamente a un tema de salud, que le ha obligado a cerrarse a cal y canto en su casa para no dejarse ver y, sobre todo, para recuperar la tranquilidad perdida en estos últimos meses entre tanto conflicto y tensión familiar.

Isabel Pantoja estaría totalmente aislada, tal y como prosigue desgranando la citada periodista: “Ni quiere llamar a nadie, ni nadie la llama, ni redes sociales. Necesita cuidarse porque tiene un concierto el 30 de diciembre y tiene que estar en forma para ese momento. Está aislada voluntariamente, pero ha dado un paso más. El apoyo médico es fundamental en estos momentos y la decisión de no tener contacto con el exterior parece que le puede ayudar, porque lo necesita”, explica. Una decisión en firme que le mantendrá alejada de los focos, las cámaras y también de su otrora círculo más íntimo, al menos hasta que vuelva a subirse a los escenarios. Una cita que ya está fijada en el calendario y que le llevará al Palau Sant Jordi de Barcelona con motivo de su gira ’50 años’.

Y es que Isabel Pantoja no solo tiene problemas familiares e inconvenientes que afectan a su salud. También se habla mucho de las deudas que le provocan quebraderos de cabeza. Las dificultades económicas son un tema recurrente con la tonadillera, como así ha apuntado también Paloma García Pelayo: “En su situación económica arrastra diferentes deudas con Hacienda que le han llevado a un embargo máximo, incluso de los ingresos que va a tener en los conciertos contratados”. Es por eso que la periodista reconoce que “la tensión en máxima en su vida diaria, está aislada completamente (…) Está yendo a un especialista por un problema serio, es un problema acumulativo. La ha alejado no solo de sus hijos, sino de sus nietos y nietas”, concluye sin querer poner nombre al mal que le afecta, pero dejando entrever que tiene mucha relación con su estado anímico que ya se ha comentado que ahora es muy bajo.