Mientras Jessica Bueno ahoga sus penas en un Bilbao en el que se siente más sola que nunca, su ex pareja, Jota Peleteiro, ha rehecho su vida junto a una mujer a la que conoció el pasado verano en una fiesta en Ibiza.

Kiko Rivera, otro ex de Jessica, ya le ha mandado mensajes de apoyo en estos momentos tan duros, al fin y al cabo es la madre de su hijo primogénito, y ella se está pensando muy seriamente abandonar con sus tres hijos la capital vizcaína para trasladarse a vivir a Sevilla, más cerca de su familia.

La tercera en discordia, una mujer muy guapa y de la que aún desconocemos su identidad, parece ser que ha sido colocada por Jota en una de sus empresas. Lo suyo, dicen, fue un completo flechazo, hasta el punto de que decidió abandonar a su familia para unir su destino a ese nuevo amor, que le tiene tan enganchado.

La ruptura ha pillado de sorpresa hasta a los padres del ex futbolista, quienes se han convertido en el mayor apoyo de Jessica en un renace tan doloroso. La unión de la modelo y sus suegros es muy fuerte. Siempre se llevaron muy bien, y ahora más que nunca.

Pero, al margen de la pena y el dolor, Jessica saca fuerzas de flaqueza de donde casi no las tiene y manda un emotivo mensaje en sus redes sociales: “Voy a quererme para querer mucho más, voy a ser yo misma siempre. A pesar de todo, a pesar de nada”. Esperemos que cumpla sus propósitos y salga adelante lo mejor posible.