Jacobo Ostos da un paso más en el mundo de la música y emprende una carrera como cantante con un trap, “Mala”, con claras alusiones sexuales. El hijo del fallecido Jaime Ostos y de María Ángeles Grajal es uno de los Dj más cotizados de nuestro país.

¿Sigue la línea marcada por Omar Montes en el trap?

Lo suyo es trap flamenco, lo mío es más comercial. Mi canción habla de sexo, es muy atrevida…

¿Es una letra muy fuerte?

Es muy cañera. En el videoclip aparezco rodeado de mujeres muy sensuales. Es un ritmo muy canalla. Como yo, ja, ja, ja.

¿Usted es canalla?

Soy canalla siempre. Y no lo oculto, estoy orgulloso de serlo.

Se cumplen seis meses de la muerte de su padre. ¿Cómo lleva el duelo su madre?

Poco a poco va recobrando los ánimos, se apoya mucho en la familia y sus amigas, intenta estar ocupada… continua con su consulta médica entre semana, y así mantiene la cabeza ocupada. Pero de vez en cuando me llama para decirme que se siente muy triste, porque se acuerda mucho de papá. Igual que yo, que le recuerdo cada día. Es imposible no echar de menos a una persona tan extraordinaria.

Han puesto a la venta la casa familiar.

Sí, es demasiado grande. Y nos dará pena perderla porque conserva muchos recuerdos. Mi madre quiere vivir en el centro de Madrid, cerca de sus amigas, y yo me alquilaré un piso en las afueras. La muerte de mi padre marca un antes y un después, un punto de inflexión, y hay que salir adelante. Afortunadamente, mi madre tiene una gran fortaleza, eso es lo que le salva.

¿El “canalla” Jacobo tiene novia?

No, tengo muy buenas amigas. Con mi ritmo de vida es complicado tener una pareja estable. Ten en cuenta que por mi trabajo de Dj me paso la vida viajando de un lado para otro.