La versión más emotiva de MasterChef, la dedicada a los mayores, y que se emitió anoche en La 1, tuvo como ganadora a la vizcaína Almudena. A sus 87 años, lideró las tres pruebas de la gala y aseguró que para ella la cocina había sido una herramienta terapéutica, pues había hecho que superarse episodios muy duros a lo largo de su vida.

Con tan solo 8 años, Almudena se inició en la cocina y presumió de su plato estrella: el crepe relleno de langostinos y setas. Además, confesó que su segunda afición era jugar a las cartas junto a sus amigas.

La concursante comenzó el primer reto con su nieto. Su primera preparación fueron unos canelones con gambas y bechamel que enamoraron al jurado, liderando la clasificación con esta primera prueba. Ganó también el cocinado por equipos pero lo que la confirmó como ganadora del talent fue su recreación de un plato de Toño Pérez, del restaurante Atrio (Cáceres).

“Nos has demostrado que siempre se puede afrontar los retos complicados con una sonrisa, buen humor y sin agobiarte, porque en ningún momento te hemos visto minimamente preocupada”, valoró la juez Samantha Vallejo-Nágera.

Una vez se supo ganadora tras conseguir 26 puntos, Almudena le dedicó el galardón (un trofeo y 12.000 euros) a su familia mientras se le saltaban las lágrimas y comentaba que MasterChef era su programa favorito: “Supongo que lo normal es emocionarse, ¿no?”, dijo.