Hugh Jackman se separa de su mujer, Deborra-Lee, tras 27 años de matrimonio

Hugh Jackman vuelve a entrar al mercado de la soltería, después de anunciarse por sorpresa este mismo viernes 15 de septiembre su intención de poner fin a su matrimonio con Deborra-Lee Jackson. Han protagonizado una de las historias de amor más singulares de Hollywood, pero también de las más estables, pues han permanecido durante los últimos 27 años formando pareja, pero el desamor les ha obligado a emprender caminos por separado.

Como viene siendo habitual ya entre los famosos a la hora de anunciar rupturas, los protagonistas han querido dar a conocer el fin de su unión matrimonial al través de su correspondiente comunicado de prensa. Una nota que no han querido compartir con sus seguidores en las redes sociales, principalmente porque no quieren ensuciar su imagen pública con una noticia tan triste, por lo que han optado por cederles el triunfo de la noticia de su separación a la revista ‘People’, quien tiene la exclusiva de su comunicado oficial.

“Hemos tenido la suerte de compartir casi tres décadas juntos como marido y mujer en un matrimonio maravilloso y amoroso. Nuestra familia ha sido y será siempre nuestra máxima prioridad. Pasamos al próximo capítulo con gratitud, amor y bondad. Apreciamos enormemente su comprensión al respetar nuestra privacidad mientras nuestra familia navega por esta transición en nuestras vidas. Esta es la única declaración que cualquiera de nosotros hará”, sentencia el comunicado de Hugh Jackman y su mujer.

La pareja se separa tras 27 años de unión y dos hijos en común: Óscar de 23 años y Ava de 18, que ahora tratan de recomponer sus vidas con la idea de que el amor entre sus padres se ha terminado. Se conocieron en 1995 en el set de rodaje de la serie Corelli. Ella ya era una actriz consagrada en el mundo del cine, mientras que él estaba dando sus primeros pasos en la industria. Al final, la fama del actor fue mayúscula, pero su amor ha soportado todas las dificultades que el destino le ha colocado en sus caminos. Sin embargo, hasta este puro sentimiento tiene su aguante y parece que las diferencias entre ellos eran demasiado como para continuar con su matrimonio.