Tradición veraniega
Los Reyes y sus hijas eligen los jardines de Alfabia para el posado
Leonor y Sofía se muestran por primera vez en público tras iniciar sus vacaciones en Mallorca
Un guion de momento casi idéntico al del pasado año. No se sabe si por casualidad o causalidad, lo cierto es que la agenda oficiosa y también oficial de la Familia Real va cumpliendo punto por punto lo esperado si se toman como referencia veranos anteriores. Tras la llegada de Felipe VI y su audiencia con las autoridades de las Illes Balears el pasado jueves, se esperaba una primera salida al mar para preparar la regata… y así fue. Lo cierto es que, tras la primera aparición pública de Doña Letizia en Mallorca para clausurar, el pasado domingo, una nueva edición del Atlàntida Film Festival, se esperaba que tuviera lugar el primer encuentro con los medios del núcleo principal de la Familia Real… y así ha sido. Los Reyes, la Princesa Leonor y la Infanta Sofía hicieron su primer posado juntos en la isla para cumplir con la «tradición». La ubicación del mismo no se supo hasta la hora de comer –española– y sonó un poco a improvisación. Pero es que no hay mucho más tiempo y el deber llama. Guste o no.
Con la caída del sol, sobre las ocho de la tarde porque antes es difícil disfrutar al aire libre debido a las temperaturas elevadas y la humedad, llegaban sonrientes Felipe y Letizia con sus hijas a los Jardines de Alfabia, finca histórica que consta de jardín y huerto, y que está documentada ya en tiempos de Jaime I, el Conquistador. Para la visita los reyes escogieron colores muy veraniegos. Felipe optó por unos pantalones blancos y camisa blanca que se va degradando a tonos azules. La reina, vestido en el color de moda, rosa fucsia; Leonor con vestido en tonos verdes y Sofía vestido étnico.
Recibidos por la familia Zaforteza, propietarios desde el año 1700 de conservar y cuidar "un patrimonio mallorquín único", como contaría después a LA RAZÓN su gerente, Cristina Zaforteza, los Reyes, Leonor y Sofía recorrieron en pequeño grupo las instalaciones de la casa. Vislumbraron el artesonado mozárabe del siglo XIII, aprendieron un poco más de historia gracias al libro de Ses Franqueses –firmado por el propio Rey Jaime I– y se sorprendieron al ver el mueble gótico más antiguo de Mallorca: una silla
Sin encuentro en Marivent
Más allá del tradicional posado de la Familia Real, este año se había generado mucha expectación alrededor de la posibilidad de que se produjera un encuentro con otros parientes Borbón en Marivent. Hace tiempo que Doña Leonor y Doña Sofía no coinciden, al menos de forma pública, con sus primos, los hijos de las Infantas Elena y Cristina, y se esperaba que este verano por fin se reunieran en Mallorca a petición de la Reina Sofía, pero finalmente no ha sido así. La emérita se encontraba este lunes en Motril en un homenaje al difunto Rey Balduino de Bélgica. Por su parte, la Infanta Cristina se encuentra de vacaciones en Grecia con sus hijos pequeños, Irene y Miguel Urdangarin; mientras que la Infanta Elena acompaña al Rey Juan Carlos I en Sanxenxo.
Hay que remontarse al año 2018 para encontrar la última fotografía de la Familia Real junto a las Infantas Elena y Cristina con sus hijos, que se tomó durante la celebración del 80º cumpleaños de la Reina Sofía, y no parece que una escena similar vaya a volver a producirse en un futuro cercano.
Leonor afronta su futuro
Indiscutiblemente, todas las miradas se centran en Leonor en sus contadas apariciones. Está a dos meses de cumplir los 18 años, una mayoría de edad que, como heredera al Trono, supone unos retos adicionales al de otros jóvenes. La princesa de Asturias vive su inminente ingreso en la Academia Militar de Zaragoza con expectación, respeto y, cómo no, algo nerviosa. Desde bien pequeña, los reyes le han inculcado los valores y le han marcado paso a paso el camino a seguir. De ahí, que esa rigidez se le note cada vez que había fotógrafos y periodistas delante. No sorprende tanto que ocurra en los actos más protocolarios pero sí en los informales y relajados, como el de ayer en Palma de Mallorca.
En lo que sí ha habido un evidente avance es en su forma de cuidar los detalles y en su consciencia del espacio. Sabe cuándo sonreír, cuándo hay que hablar y cuándo hay que retirarse. También ha madurado. Su estancia de dos años realizando el bachiller lejos de su país, es un bagaje necesario para los próximos pasos en su formación. La Constitución recoge que, al alcanzar la mayoría de edad, la heredera ha de jurar la Carta Magna ante las Cortes: se desconoce si lo hará el mismo día de su cumpleaños, el 31 de octubre, o será más adelante, algo que dependerá del Gobierno que se forme a partir de los resultados de las últimas elecciones generales. Sea como sea, ese día se dará un paso más en sus responsabilidades como futura reina.