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Los Reyes de los Países Bajos acuden a la preboda de la duquesa de Medinaceli

El enlace entre Victoria Hogenlohe-Lagenburg y Maxime Corneille ha hecho desplazarse a miembros de la alta sociedad

La agenda de eventos para la alta sociedad de estos últimos meses está repleta de fechas importantes en los que se espera la asistencia de los miembros de las principales casas de la aristocracia patria. Sin embargo, en esta ocasión la boda de la duquesa de Meinaceli ha hecho llamar a los reyes de los Países Bajos. Este sábado 14 de octubre ha tenido lugar el enlace entre Victoria Hogenlohe-Lagenburg, la actual cabeza de familia de la Casa de Medinaceli, y Maxime Corneille.

Previo a tan esperado enlace en el que han asistido distinguidos miembros de las familias más notables del país, tuvo lugar una pequeña ceremonia preboda. Aunque la máxima de la pareja es contar con la mayor discreción posible, se han filtrado algunas imágenes de sus invitados más célebres.

La sorpresa llegó cuando Máxima de Holanda hizo acto de presencia junto a su marido el rey Guillermo y su hija la princesa Amalia, que presumía de un look inspirado en el más puro sentido flamenco.

Princesa Amalia de Holanda
Princesa Amalia de Holanda Gtres

La preboda se organizó por todo lo alto en el Palacio de Campo Real, donde se han podido ver algunos nombres muy conocidos como Luis Medina y su pareja Clara o Miriam de Ungría y su hijo Boris de Bulgaria. Sin embargo, no se conoció hasta ayer que los reyes de Holanda asistirían a Jerez de la Frontera para acompañar a la duquesa de Meinaceli en su gran día, por lo que su presencia ha generado un gran impacto en los medios.

Ha sido en uno de los edificios más emblemáticos de la ciudad donde la pareja ofreció a sus allegados un adelanto del gran día de su boda en la iglesia de San Miguel y que estaría oficiada por el sacerdote Ignacio Jiménez Sánchez-Dalp.

El enlace contó con grandes ausencias, ya que el clan familiar se encuentra dividido por un enfrentamiento respecto a la herencia. Este ha hecho que Victoria Hohenlohe-Lagenburg no celebrara su boda en el palacio de Pilatos de Sevilla y optara por otro lugar icónico que ya ha acogido otras ceremonias de personajes de gran renombre.