La ex primera dama francesa y cantante Carla Bruni bromeó anoche sobre las escuchas telefónicas realizadas por los jueces a su marido, Nicolas Sarkozy, en el marco de una investigación judicial por presunta corrupción. "Hace unos dos o tres días que ya no me atrevo a cantar. Alguien me ha dicho ... que se nos escucha", dijo al público de la sala parisina Olympia al presentar su tema más conocido.

El concierto en la capital gala se incluye dentro de la gira de presentación de su cuarto y último disco, "Little french songs", y el comentario de la también exmodelo fue seguido por parte de los asistentes con gritos de "¡Traidores!", según recogen hoy los medios galos.

Con ese comentario volvió a poner de actualidad las escuchas a Sarkozy y a su abogado, Thierry Herzog, ordenadas dentro de una investigación sobre la presunta financiación ilegal de la campaña presidencial de 2007 del ahora ex jefe de Estado.

Según lo publicado por "Le Monde"el pasado viernes, de esas escuchas se desprende que Herzog estaba en contacto con un magistrado del Tribunal Supremo que les daba cuenta de los avances en las pesquisas sobre esa investigación.

El primer ministro francés, Jean-Marc Ayrault, admitió ayer que el Ejecutivo conocía que los jueces habían ordenado pinchar el teléfono del expresidente, pero subrayó que solo estuvieron al tanto el mismo día de la apertura de la investigación, y negó que se les hubiera transmitido el contenido de esas conversaciones.