Tribunales

La UCO constata un "borrado intencionado" del móvil del fiscal general el mismo día que el Supremo le abrió causa

Informa al Supremo que no se han localizado mensajes previos al 16 de octubre y que se borraron los mensajes "hasta en dos ocasiones"

La UCO ha constatado en un nuevo informe remitido al Tribunal Supremo que el fiscal general del Estado, Álvaro García Ortiz, borró los mensajes de su terminal móvil "hasta en dos ocasiones" el pasado 16 de octubre; mismo día que arrancó la investigación contra él por presunta revelación de secretos. La Guardia Civil apunta en este nuevo oficio a un "borrado intencionado" y avisa que no se puede recuperar el contenido previo a esa fecha.

El informe, al que ha tenido acceso LA RAZÓN, trae causa de la petición del magistrado Ángel Hurtado, que trata de esclarecer qué información atesoraba el fiscal general en su teléfono, tras constatarse con motivo del registro de su despacho que cambió de dispositivos y eliminó su contenido. Ahora, la UCO constata el borrado y determina que la actividad en este teléfono comenzó el 23 de octubre.

"No se han encontrado mensajes anteriores al 16 de octubre, en la aplicación de mensajería de Whatsapp del dispositivo (...). Se debe, fundamentalmente, al vaciado o borrado intencionado de todos los mensajes contenidos en las distintas conversaciones, siendo realizada esta acción hasta en dos ocasiones el indicado 16 de octubre", reza el nuevo informe de la Unidad Central Operativa (UCO).

"Extraordinaria actividad de llamadas"

Entre los días 8 y 14 de marzo el teléfono del fiscal general registró 69 llamadas salientes y 54 recibidas. Se trató de un total de 123 comunicaciones, la mayoría de las cuáles se produjeron en las horas clave que investiga el Tribunal Supremo. Entre el 13 de marzo y el día siguiente se produjeron 57 llamadas. Las fechas coinciden con la publicación en prensa de un supuesto pacto de la Fiscalía a la pareja de Isabel Díaz Ayuso -que se publicó pasadas las 21.00 horas del 13 de marzo- y la posterior filtración de los correos así como la difusión de la nota informativa, la cual se dio a conocer ya el 14 de marzo por la mañana.

Informe UCO del Fiscal General Álvaro García Ortiz
Informe UCO del Fiscal General Álvaro García OrtizLa Razón

De la información facilitada por las compañías se desprende que el 12 de marzo, coincidiendo con la publicación en el Diario.es de la denuncia de la Fiscalía contra él por dos delitos, se produjeron llamadas tanto con la jefa de prensa del Ministerio Público como con Diego Villafañe, mano derecha suya en la institución y también investigado en estas diligencias por revelación de secretos.

El mismo día de la filtración, el 13 de marzo, el fiscal general mantuvo una conversación de seis minutos de reloj con una fiscal del Ministerio Público pasadas las 17.00 horas. En los minutos previos a la publicación de la noticia sobre la presunta oferta de pacto a González Amador se intercambió llamadas con la fiscal superior de Madrid, Almudena Lastra, y con la fiscal jefa de Madrid, Pilar Rodríguez; esta última también investigada en la causa.

Del mismo modo, destacan que el periodista de la Cadena Ser que publicó la primera información en prensa relativa a los correos, Miguel Ángel Campos, no interactuó con García Ortiz, que recibió una hora antes en su cuenta personal dichas comunicaciones. Los agentes detectan una llamada del periodista al fiscal general a las 21:38 horas, pero éste estaba hablando en ese momento con Pilar Rodríguez.

También se borró la cuenta de correo

"No existe ninguna llamada, ni intento de comunicación con este terminal del fiscal general del Estado, a excepción de ésta, durante toda la tarde/noche en la que se desarrollan los acontecimientos", reza la UCO, confirmando de esta forma la testifical del periodista en sede judicial. Como ya era conocido, a lo largo de esa noche el fiscal general se fue cruzando comunicaciones con Lastra, Rodríguez y también con Virma Alonso, fiscal general decana de Delitos Económicos de la Fiscalía Provincial de Madrid.

Ya el 14 de marzo, continuaron las comunicaciones entre la cúpula del ente en aras a preparar la publicación de la nota de desmentido. Por la tarde se produjeron las llamadas con el decano del Ilustre Colegio de Abogados de Madrid, Eugenio Ribón, quien les llamó para quejarse por la nota de prensa divulgada porque contenía comunicaciones entre el fiscal del caso, Julián Salto, y el abogado de González Amador; material que consideraron sensible.

En relación con el número de identidad de los dos móviles asociados a García Ortiz, la UCO concluye que el primero de ellos, perteneciente a la operadora Vodafone, detecta un cambio de terminal el 23 de octubre; esto es, siete días después de que el Supremo diera el primer paso para investigarle. Sobre el segundo, asociado a la compañía Movistar, se detecta otro cambio el mismo día 23. La UCO también informa de que no ha sido posible recuperar todo lo almacenado en sus cuentas de Google Drive debido a la "eliminación deliberada" de la cuenta asociada a dicho servicio.

Siete copias de seguridad

En otro informe separado la Guardia Civil remite al instructor los resultados del análisis de uno de los dispositivos del fiscal general, en relación con las aplicaciones almacenadas. Los agentes determinan que la plataforma más empleada para comunicarse fue Whatsapp Messenger. En la misma encontraron 5.877 mensajes, si bien todos los previos al 16 de octubre también han sido borrados.

"En relación con la posibilidad de recuperación de información almacenada en las bases de datos, se indica que las herramientas forenses utilizadas para tales efectos no han conseguido la recuperación de mensajes eliminados con anterioridad", exponen. Al mismo tiempo constatan que realizó siete copias de seguridad entre los días 24 de octubre (uno después de cambiarse los teléfonos) y 30 de octubre (día en que la UCO registró su despacho). Sin embargo, en este caso los agentes tampoco han conseguido descargarse la copia de seguridad alojada en el servidor.

Con todo, encontraron una segunda cuenta de correo vinculada al fiscal general del Estado, la cual se encuentra activa. En aras a recuperar toda la información borrada, la Guardia Civil precisa que "existe un factor determinante" que dificulta el rastreo y no es otro que "la inexistencia de la información en el almacenamiento". "Los resultados relacionados con la recuperación de mensajes de la aplicación Whatsapp han sido negativos debido a que, la información objeto de interés, no ha existido en el dispositivo".