
Psicología
Los niños que no tienen problemas para relacionarse con los demás tienen padres que hacen estas siete cosas
Según indican los expertos, la comunicación entre ambos es fundamental en el proceso de crianza

Criar a un niño es un desafío que va más allá de garantizar su bienestar físico. Los padres también buscan que sus hijos sean felices y capaces de desenvolverse en sociedad. Para lograrlo, la inteligencia emocional es un factor clave, ya que permite a los niños desarrollar empatía, resolver conflictos y gestionar situaciones de estrés de manera efectiva.
Según la experta en crianza Kelsey Mora, la comunicación entre padres e hijos desempeña un papel crucial en este proceso. "Los niños que se comunican bien, manejan sus emociones con eficacia y construyen relaciones saludables han aprendido estas habilidades de sus padres", señala. Existen ciertas prácticas que pueden potenciar estas competencias en los menores y prepararlos mejor para el futuro.
Enseñar a gestionar las emociones
Reconocer las propias emociones no es una tarea sencilla, ni siquiera para los adultos. Sin embargo, ayudar a los niños a nombrar sus sentimientos y validarlos es esencial en su desarrollo emocional. La psicóloga María Jesús Campos Osa destaca la importancia de que los padres verbalicen sus emociones frente a los niños, normalizando tanto las positivas como las negativas. Asimismo, es fundamental evitar frases como "no llores", ya que pueden inhibir la expresión emocional de los pequeños.
Fomentar la comunicación abierta
Abordar asuntos complicados como la muerte o una enfermedad puede resultar desafiante para los padres, pero evitarlos no siempre es lo más adecuado. La transparencia, adaptada a la edad y nivel de comprensión del niño, es clave. Utilizar un lenguaje claro y brindar la posibilidad de hacer preguntas ayuda a los menores a sentirse seguros para expresar sus inquietudes y buscar apoyo cuando lo necesiten.
Promover la empatía y la resolución de conflictos
Los niños aprenden a gestionar conflictos observando a los adultos. Si ven que sus padres manejan desacuerdos con respeto y calma, internalizarán esas estrategias para sus propias interacciones. Formular preguntas como: "¿Cómo crees que se siente tu amigo con lo que pasó?" o "¿Qué podría ayudar a mejorar esta situación?" los impulsa a desarrollar una perspectiva más amplia y a entender las consecuencias de sus acciones en los demás.
Establecer límites claros
Una crianza positiva no implica ceder a todas las demandas de los niños. Poner límites claros y consistentes les proporciona estructura y seguridad. Según el neuropsicólogo Álvaro Bilbao, comunicar estos límites de manera firme pero amorosa enseña a los niños a respetar normas y expresar sus propios límites de forma asertiva en el futuro.
Jugar con los niños
El juego es una herramienta fundamental para el desarrollo emocional e intelectual infantil. Unicef destaca que el juego no solo mejora la motricidad, sino que también fomenta la resolución de problemas y la expresión emocional. Participar en actividades lúdicas con los niños fortalece el vínculo afectivo y estimula su creatividad y confianza.
Prepararlos para enfrentarse a nuevos problemas
Anticipar situaciones desconocidas puede reducir la ansiedad infantil. Explicar de antemano lo que sucederá en una consulta médica o en el primer día de colegio, por ejemplo, les brinda seguridad. Además, practicar cómo responder ante situaciones difíciles, como la presión social, ayuda a los niños a defender sus necesidades y establecer límites adecuados.
Fomentar la resolución de problemas
Existe una diferencia significativa entre resolver los problemas por los niños y enseñarles a enfrentarlos. Brindar herramientas para que puedan superar sus propios desafíos les permite desarrollar resiliencia y confianza en sí mismos. Según Mora, en lugar de ofrecer soluciones inmediatas, es más efectivo guiar con preguntas como: "¿Qué crees que podrías hacer para mejorar esta situación?". De esta manera, los niños aprenden a enfrentarse a los obstáculos con autonomía.
✕
Accede a tu cuenta para comentar