Antes de saber que el PSOE iba a desconvocar, por segunda vez esta semana, la Comisión de Hacienda del Congreso, que tiene que debatir el proyecto para crear un nuevo impuesto mínimo global del 15% para las empresas multinacionales, ante la falta de acuerdo con sus socios, el PP se habrían a la posibilidad de "salvarlo". Sin embargo, con esta maniobra, de haberse celebrado la comisión, habrían dejado al Ejecutivo expuesto a una nueva derrota parlamentaria en el Pleno del Congreso, dado que todavía no está clara cuál será la posición en pleno. A la vez, los populares habrían conseguido así dividir a los socios, al ser ellos quienes ayudasen de nuevo al Gobierno en una votación, mientras que se visibiliza la desunión del bloque de aliados.

Fuentes populares aseguraban este jueves que solo apoyarían aquello que venga impuesto por el marco comunitario, como es el caso de la transposición de la directiva sobre el mínimo complementario de sociedades pactado en Bruselas. "El PP está en contra de cualquier subida impositiva", por lo que advierte de que solo apoyará las que vengan impuestas por el marco comunitario, como es el caso de la transposición de la directiva sobre el mínimo complementario de sociedades pactado en Bruselas. Además, respaldamos la eliminación del fraude a hidrocarburos.

Asimismo, recordaban que "en lo que llevamos de año la recaudación se ha incrementado en 15.000 millones de euros. Desde 2018, el Gobierno socialista ha subido los impuestos y las cotizaciones en 81 ocasiones sin adecuar la tarifa del IRPF a la subida de la inflación", recaudando un 30 por ciento más, 63.000 millones de euros. Las mismas fuentes aseguraban que "la voracidad fiscal del Gobierno de Sánchez está asfixiando a las familias y a la inversión sin establecer ninguna medida correctora del aumento de un 20 por ciento de los precios, tal y como ha propuesto el PP en reiteradas ocasiones".

Esta posición, la de validar tan solo la directiva europea, estaba siendo una de las opciones valoradas en estos momentos por sus socios. Bildu y PNV apuntan en este sentido, y Podemos lo había reclamado previamente también, ante el encallamiento de las conversaciones entre socios. Así, el texto superaría el trámite parlamentario sin inconveniente, y al margen de lo que voten el resto de grupos, pero no saldría adelante la reforma fiscal que quiere aprobar el Gobierno. De esta manera, sin embargo, el Gobierno perdería su paquete fiscal y deberá volver a negociar con sus socios desde el principio, a partir de ahora.

Tras desconvocarse la comisión, los populares han cargado contra el Gobierno a quien acusan de "protegerse de otra derrota parlamentaria" al posponer al lunes la votación de los nuevos impuestazos que esquilmarán aún más a las clases medias y bajas de España. "La debilidad parlamentaria del Ejecutivo es manifiesta". "El Ejecutivo se burla de la soberanía nacional al no respetar las reglas establecidas en las Cortes Generales convocando y desconvocando a su antojo una comisión parlamentaria. Es el caos habitual de este Gobierno, pero no por ello es serio", aseguran fuentes populares.

Y es que, si no consigue llegar a un acuerdo con sus socios en el plano fiscal, "parece complicado que lo haga para sacar adelante los presupuestos si no es con nuevas cesiones a los independentistas" a costa de los ciudadanos, ha advertido el PP. "Con el Partido Popular que no cuenten para subir impuestos", insistieron en perjuicio de la mayoría de los españoles, que ya encuentran demasiadas dificultades para llegar a fin de mes.