Tribunales

Koldo también desmiente a Aldama: niega el cobro de comisiones y protege a Ábalos

Niega las presuntas mordidas a Santos Cerdán y al jefe de gabinete de la ministra Montero

Koldo García sigue la estrategia del que fuera su jefe, José Luis Ábalos, en el Tribunal Supremo. El exasesor del Ministerio de Transportes ha negado en su interrogatorio en sede judicial el cobro de mordidas y se ha desligado de los manuscritos señalados por Víctor de Aldama en relación con presuntos amaños en las adjudicaciones.

Fuentes jurídicas presentes en su declaración confirman a LA RAZÓN que el exchófer de Ábalos ha comparecido cerca de tres horas en las que ha respondido a todas las partes presentes. Durante el interrogatorio ha descartado también que hubiera entregado al secretario de organización del PSOE, Santos Cerdán, un sobre con 15.000 euros en un bar enfrente de Ferraz y también que entregaran 25.000 euros en metálico a Carlos Moreno, jefe de gabinete de María Jesús Montero, para que les ayudara con una gestión en el Ministerio de Hacienda. No obstante, sí ha ratificado que Aldama y Moreno tenían "citas" y no ha descartado que llegara a coincidir con él en un bar.

De igual forma ha dicho que él no presenció ninguna entrega de dinero en el despacho de Ábalos y que no se repartió ninguna cuantía con él. Así pues, Koldo García ha cerrado filas con el que fuera su jefe frente a Aldama, a quien ha desmentido en varias ocasiones a lo largo del interrogatorio. Al respecto, ha dicho que los viajes a México en el año 2019 no los organizó el comisionista, como él mismo defiende, sino el Ministerio de Asuntos Exteriores.

Además, también ha descartado que fuera él quien eligiera a la empresa Soluciones de Gestión para adjudicar los contratos de suministro de mascarillas. De hecho, ha especificado que su labor se limitó a remitir las ofertas que recibieron al entonces subsecretario del Ministerio Jesús Manuel Gómez y a los técnicos. Al ministro no le envió nada porque "no se encargaba de estas cosas". Sin embargo, ha insistido en que no sabe por qué se escogió a esta pequeña firma, pese a que los investigadores sospechan que había un preacuerdo para adjudicarle los contratos de emergencia por 54 millones de euros.

Su vínculo con Jessica

Lo que sí ha confirmado es que gestionó la búsqueda de casa en Cádiz para José Luis Ábalos. El investigado ha especificado que asesoró al entonces ministro de Transportes en relación con la compra de esta vivienda que, según los investigadores, la costeó Aldama para que la disfrutara el líder socialista. Preguntado específicamente por la implicación de Aldama en esta operación, Koldo ha precisado que medió porque "vivía por allí y tenía más conocimiento sobre el mercado".

También ha reconocido que conoció a Jessica, la pareja de Ábalos en el momento de los hechos. Preguntado por el motivo por el cual la trama le pagó el alquiler del piso de lujo donde residía en el centro de Madrid, Koldo ha indicado que lo hicieron porque eran "amigos". De hecho, ha asegurado que la conocía desde el año 2016 o 2017 y que su relación de amistad se terminó en 2021, coincidiendo con el cese de Ábalos como ministro de Transportes.

En concreto ha dicho que el socio de Aldama, Luis Alberto Escolano, les pidió que dieran habitáculo a Jessica, porque él no podía ayudarla al residir en un piso de 35 metros cuadrados. Al respecto, ha argumentado que cedió el piso de manera gratuita pero Escolano se ofreció a costear parte de los gastos al igual que su hermano, Joseba García, porque también lo utilizaron para "reuniones". Se trató de una vivienda ubicada en la madrileña Plaza de España por la que pagaron un alquiler mensual de 2.700 euros. Sobre el contrato que le hicieron a Jessica para que trabajara en la firma pública Ineco (dependiente del Ministerio de Transportes) se ha limitado a decir que no tenía "enchufe" y que la seleccionó su hermano Joseba García.

Se suma a la estrategia de Ábalos

El que fuera asesor de José Luis Ábalos ha comparecido como investigado este martes un día después de que hiciera lo propio el comisionista Víctor de Aldama. Se trata de la primera ocasión en la que el que escolta del ministro de Transportes declara en relación con la causa que lleva su nombre, ya que en febrero, tras el estallido de la trama y su posterior detención, se acogió a su derecho a no declarar. En aquel momento las diligencias se encontraban bajo secreto de sumario.

Diez meses después el escenario ha cambiado. Especialmente a tenor de la estrategia de colaboración de Aldama y de la confesión por los delitos que se le atribuyen. El 'conseguidor' de la trama ya le señaló en su primera comparecencia en la Audiencia Nacional el pasado 21 de noviembre. En ese primer encuentro, Aldama apuntó a una presunta financiación irregular del PSOE y confirmó las sospechas de la UCO acerca de que Koldo García y José Luis Ábalos habrían cobrado mordidas. Del mismo modo, delegó en él la concreción de los contratos de mascarillas con la empresa de la trama, Soluciones de Gestión.

Sin embargo, Koldo ha desmentido la mayoría de las acusaciones y se ha limitado a hablar de encuentros puntuales en bares. Al igual que ocurrió ayer con Víctor Aldama, el juez Leopoldo Puente ha acordado imponerle como medidas cautelares prohibición de salir de España, retirada de pasaporte y comparecencias quincenales en el juzgado. Se trata de las mismas medidas cautelares que le impuso en febrero el magistrado de la Audiencia Nacional, Ismael Moreno.