Migración
El Gobierno aprueba un nuevo reglamento con el que prevé regularizar a 300.000 migrantes al año
La medida aplicada a la Ley de Extranjería simplifica procedimientos, elimina duplicidades y ofrece mayores garantías a personas que buscan regularizar su situación en España
El Gobierno ha aprobado este martes el nuevo Reglamento de la Ley de Extranjería por el cual "se simplifican procedimientos, se eliminan duplicidades y se dan mayores garantías y rigor jurídico", según ha anunciado Elma Saiz, la ministra de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones. La medida pretende regularizar alrededor de 300.000 personas migrantes al año durante los próximos tres.
"España cuenta con 7 millones de personas extranjeras con documentación de residencia en vigor. Lo que hace imprescindible contar con un marco normativo adecuado que responda de manera eficaz a sus situaciones y a sus necesidades especiales", ha defendido Saiz esta mañana sobre la que para ella es la reforma más ambiciosa desde que la ley entró en vigor hace trece años.
Este cambio, según ha explicado la ministra, pretende servir para combatir mafias, fraudes y la vulneración de derechos.
Estas son las novedades del nuevo reglamento
El nuevo reglamento pretende reducir la burocracia. La primera iniciativa ha sido redefinir los visados. A partir de ahora, las autorizaciones iniciales serán de un año y las posteriores renovaciones, cada cuatro. Por otro lado, el visado de búsqueda de empleo amplía su vigencia de los tres a los doce meses con el objetivo de que las personas extranjeras "consigan un trabajo adecuado a su perfil profesional y, al mismo tiempo, que las empresas encuentren a los profesionales que necesita".
De esta manera, también se establece que no será necesario abandonar el país para obtener la residencia de larga duración después de haber tenido una temporal. Saiz ha establecido que la nueva categorización de los visados reduce posibles confusiones y los ha clasificado en seis tipos de visados: estancia de corta duración, de larga duración, de residencia, de tránsito aeroportuario, de carácter extraordinario y para la búsqueda de empleo.
Con respecto a los arraigos, que hacen referencia a la figura específica por la que una persona extranjera pueda regularizar su situación, la ministra ha definido cinco clases diferentes. Estas modalidades son el arraigo social, socioformativo, sociolaboral, familiar y el de segunda oportunidad. Anteriormente, solo estaban reconocidas tres 'llaves': formación, trabajo y familia.
Una de las novedades más importantes en esta materia es la reducción de tres a dos años por el tiempo en el que un migrante irregular debe haber vivido en España para poder empezar a tramitar un permiso de residencia por "arraigo social". Esto implica que aquellas personas que llegan de manera irregular a España esperarán un año menos para poder solicitar su autorización de residencia. Según ha defendido el Ministerio, esta iniciativa pretende "priorizar los vínculos con residentes regulares" y "flexibilizar la acreditación de medios económicos".
Saiz ha anunciado que a finales del año 2023 había más de 210.000 personas con autorización por arraigo, 85.000 más que en 2022. Con la iniciativa anunciada esta mañana alrededor de 300.000 personas podrán regularizar su situación cada año en los próximos tres años.
Por otra parte, este nuevo reglamento pretende reforzar los requisitos y obligaciones de los centros de estudios. La ministra ha asegurado que este nuevo reglamento facilita una vía rápida para poder enlazar una autorización de trabajo una vez que las personas extranjeras terminen los estudios. Durante su formación, además, estarán autorizados a trabajar un máximo de 30 horas semanales e independientemente de los estudios que estén cursando.
Elma Saiz ha defendido esta iniciativa para "captar el talento, independiente de su nacionalidad". Según un informe del Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, las personas extranjeras representan un 13,6% del total de afiliados a la Seguridad Social, dos puntos más que hace dos años. "España es hoy por suerte un país de oportunidades, mientras que hace años las sucesivas crisis obligaban a nuestros jóvenes, a nuestras familias a emigrar. Ahora somos un polo de atracción de inversiones, de talento y de crecimiento económico", ha manifestado la ministra.