El Supremo concluye que ni Barcina ni su consejera de Hacienda prevaricaron

El Tribunal Supremo ha concluido que ni la presidenta de Navarra, Yolanda Barcina, ni la vicepresidenta y consejera de Hacienda de la comunidad, Lourdes Goikoetxea, cometieron un delito de prevaricación en el caso relacionado con la Hacienda de esta comunidad y que estuvo a punto de provocar una moción de censura.

El Alto Tribunal hizo público hoy el auto en el se archivan las denuncias formuladas por la Asociación de Consumidores, Usuarios y Contribuyentes de Navarra (Kontuz) y el sindicato ELA. Estos colectivos acusaban a Barcina y a su consejera de prevaricación y tráfico de influencias, entre otros, delitos que los magistrados entiendes que no son constitutivas de delito. Esta denuncia se sumó a otros casos de corrupción en los que estaba implicado el Gobierno de Barcina y que estuvieron a punto de provocar una moción de censura que finalmente fue detenida desde Ferraz porque obligaba al PSOE a aliarse con Bildu.

No obstante, los hechos recogidos en el auto sí que motivaron la dimisión en enero de este año de la por entonces directora de la Hacienda Tributaria de esta comunidad, Idoia Nieves, tras hacer públicas las presiones recibidas por parte de Goikoetxea para facilitarle información de algunos contribuyentes.

Respecto al posible delito de tráfico de influencias, los magistrados reconocen que se trata de "conductas moralmente reprochables"que podrían conllevar "infracciones disciplinarias"si bien no revisten un comportamiento delictivo.

Asimismo, el Tribunal considera que no se aportan indicios que constaten irregularidades en la concesión una subvención de 10.000 euros por parte del Departamento de Empleo de Navarra a una sociedad cercana a Goikoetxea.