Memoria Histórica
Con la declaración BIC ya en firme, la familia Franco tendrá que abrir la Casa Cornide cuatro días al mes
Colectivos memorialistas de La Coruña demandan la reclamación de la propiedad en una operación similar a la del Pazo de Meirás
La declaración de Bien de Interés Cultural (BIC) de la Casa Cornide, un palacete del siglo XVIII de La Coruña en manos de la familia Franco, es firme y ya está en vigor la obligación de abrirla al público al menos cuatro días al mes.
El Diario Oficial de Galicia publicó el pasado mes de mayo la declaración de BIC de la Casa Cornide, después de lo cual se publicó en el Boletín Oficial del Estado y empezaron a correr los plazos para recursos administrativos o judiciales contra el acuerdo del Consello de la Xunta.
Transcurrido este periodo y ante la ausencia de recursos, según han confirmado a Efe fuentes autonómicas y judiciales, el inmueble ya es Bien de Interés Cultural a todos los efectos, lo que incluye la obligación a los titulares de permitir "su visita pública gratuita un número mínimo de cuatro días al mes durante, al menos, cuatro horas al día, que serán definidos previamente".
El Consello de la Xunta declaró el pasado 27 de abril BIC el palacete de la Casa Cornide, ubicado en el casco histórico de La Coruña, frente a la colegiata de Santa María.
La propiedad del inmueble es objeto de controversia en la actualidad, pues tras ser propiedad de la familia Cornide pasó a ser pública. La familia Franco siempre defendió que se trató de una operación legal fruto de una voluntad de Pedro Barrié de la Maza, conde de Fenosa, pero los memorialistas argumentan que tanto Carmen Polo como Francisco Franco supervisaron los movimientos, por lo que el Consistorio ha anunciado acciones judiciales para recuperarla.
El inmueble del siglo XVIII es uno de los pocos ejemplos que queda de la arquitectura residencial de la Ilustración en Galicia, y en él vivió una de las más destacadas personalidades do Siglo de las Luces, el polígrafo coruñés José Andrés Cornide Folgueira e Saavedra.
Tuvo, entre otras funciones, la de sede del Ayuntamiento de La Coruña y los colectivos memorialistas de la ciudad demandan la reclamación de la propiedad a nivel municipal, en una operación similar a la que llevó a cabo el Estado con el Pazo de Meirás.
La familia Franco tenía la posibilidad de recurrir la declaración BIC por la vía administrativa y judicial, cosa que ya hizo con Meirás que, tras ser declarado BIC en 2008, no se mostró al público hasta 2011, una vez resueltos los recursos, pero Francisco Franco Martínez-Bordiú, confirmó a LA RAZÓN que esta vez no se planteaban esa opción: «No vamos a recurrir porque no vamos a seguir gastando dinero en algo que es potestativo de la Xunta y que no se puede ganar, porque ellos deciden qué es BIC y qué no». Algo que, en su opinión, «puede estar más justificado en el caso de la casa Cornide que respecto a Meirás».
Los descendientes de Franco pusieron el inmueble a la venta en julio de 2020 en la inmobiliaria Philippot & Lloyd por un precio «a consultar».